La “U” y el sueño más cercano

Prudencia y tranquilidad. Esas son las palabras más usadas de Ángel Guillermo Hoyos en sus conferencias, desde, que asumió la banca de la Universidad de Chile.

La prudencia es la moderación, la calma en el accionar. Hoyos llega a un camarín destrozado. Por el suelo. Anímica, profesional y psicológicamente y sin trazos de reacción, luego del síndrome Sampaoli, con una pequeña luz de esperanzas con el torneo ganado por Lasarte, pasando por el desastre con Becacecce, con unos partidos sin ninguna mejoría con Castañeda.

Con ese panorama se encuentra Don Ángel Guillermo. Empezó a delinear una alternativa. ¿Por dónde comienzo? Y cual mágico, que entiende, que llegó a el equipo, y no, a cualquier equipo, comienza a desarrollar un plan de trabajo, que consistía en mejorarlo emocionalmente. Trabajo de hormiga y resultado gigante

Hoy la “U” es puntera con justicia. Con un buen nivel de juego. Y figuras descollantes. Hoy los azules dependen de sí mismos. Fue a Rancagua y todo auguraba un panorama difícil. El primer tiempo, se lesiona Benegas tempranamente y entra en su reemplazo Monzón. Nos entraban los fantasmas de Católica y aunque le cuesta acomodarse, Lorenzetti hace el primer gol sin ser superior en líneas generales. Antes lo tuvo Mora.

En el segundo tiempo entra con vértigo y le resulta todo. Con un gol de extraordinaria factura de Monzón, y luego el infaltable Morita, que sella un sólido 3 a 0.

Hoy más, que nunca, la estrategia de Hoyos está dando sus frutos, a los que el periodismo, por fin debe de rendirse. Porque he visto burlescamente a connotados reporteros, referirse a la condición de creyente de este hombre. Devoto de la Virgen de Lourdes, que inculca más que nada, el respeto y la tranquilidad. Mesura.

Festeja el pueblo azul, festeja el juego intencionado. A sus jugadores, que lo entregan todo, festejamos la emoción de un final electrizante de un mediocre campeonato, pero lo más festejado es, que dependemos de nosotros, es que, llenaremos el nacional, más de una vez, es que el tiempo le ha dado la razón y por supuesto, a esa hinchada maravillosa, que las sufre todas, que las alienta todas, que es reconocida por cuanto extranjero viene acá (si no, que lo diga Corinthians) como la que no se entrega nunca. No deja de aleonar nunca. Y no para de contener nunca.

Jamás los azules han estado más cerca del título este año, no por estar un punto arriba del segundo equipo y depender solo de nosotros, quedando un solo partido, sino por justicia, por lo mostrado, por venir de menos a más, justicia porque nos hemos sobrepuesto a situaciones muy adversas. Y porque hoy se ha rescatado en forma definitiva la palabra jerarquía para los azules.

Desde Facebook:

Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado