Las mentiras de la derecha

Los hechos históricos rara vez ocurren por una sola razón. Generalmente son la suma de gran cantidad de motivos que se suman para que determinado evento suceda.

El triunfo de la derecha en las pasadas elecciones puede deberse, entre otras cosas, a la imposición de ciertos esloganes que fueron reproducidos como ciertos por los seguidores y parte importante de los medios de comunicación, repetidos hasta que se aceptaron como ciertos.

El más recurrido, utilizando diversas frases, fue decir que la economía estaba en el despeñadero y el país estancado. Concepto repetido continuamente por todos los políticos de la derecha. Algunas cifras afirmaban esta opinión (baja moderada en el crecimiento), pero varias otras lo desmentían (venta de artículos de lujo, inflación). Pero no importaba si era cierto o no, lo que valía para la derecha es que se instalara como verdad.

Algo semejante ocurrió con la inmigración, cuando al inicio de la campaña el candidato Sebastián Piñera la relacionó con la delincuencia, siendo que según de cifras de CEPAL, PDI y OIT no es efectivo.

Una afirmación falsa pero agradable a los oídos de cierto público, principalmente lectores de titulares más que de desmentidos. Y en esto ayudaron bastante los medios afines al candidato derechista, que son muchos.

Instalar un tema, obviar otros. En noviembre de 2017, en el programa “Tolerancia Cero”, los periodistas Daniel Matamala y Mónica Rincón cuestionaron al candidato derechista sobre su evasión de impuestos a través de empresas zombis y él simplemente escabulló el tema y no fue titular al día siguiente, cosa muy distinta a lo ocurrido, por ejemplo, con el caso Caval.

Una vez transcurrida la primera vuelta, con un resultado incierto, la derecha instaló otro tema, adelantándose a una eventual derrota que finalmente no se produjo. El candidato Piñera anunció abiertamente y sin exhibir ninguna prueba que las elecciones estaban viciadas y que la segunda vuelta también lo estaría. Nuevamente la duda, una declaración sin comprobar que ganó titulares y serviría para relativizar o cuestionar el resultado si el ganador hubiera sido Alejandro Guillier. Y nuevamente, repetida por gran parte de la prensa sin hacer mayores cuestionamientos.

Esto tiene que ver también con la supuesta manipulación de metodologías utilizadas por el Banco Mundial para hacer creer que le economía chilena iba en picada siendo que no era así.

Esta modalidad no fue algo propio de esta campaña. La derecha viene hace décadas usando la lucha contra la delincuencia como uno de sus emblemas, haciéndonos creer que vivimos en una mezcla de Medellín de los 80 con Somalía de los 90, siendo que según el Índice de Paz Global al 2017 Chile es el segundo país más tranquilo de toda América y 24° del mundo. Pero el miedo es un arma muy eficaz en política.

Recordemos también las mentiras utilizadas en el debate de la ley de aborto (se acaba la Teletón), sobre la educación gratuita (cerrarán miles de colegios) o un eventual nuevo gobierno de la Nueva Mayoría (seremos como Venezuela), atemorizar a través de la mentira. O de verdades a medias.

No pretendemos decir que quienes votaron por la derecha sean bobalicones o ignorantes, ni que los políticos de Chile Vamos sean todos mentirosos, pero evidentemente hay lineamientos y directrices que se repiten y nos hacen creer en un estilo pensado y preparado, como toda institución que cuenta con protocolos para enfrentarse a los medios.

La derecha no ganó solo por esto, pero fue uno de los factores que influyeron en su triunfo. Por nuestra parte, ahora que ellos serán gobierno, miraremos con escepticismo muchas de sus declaraciones.

Desde Facebook:

Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado