¿Se está cayendo Chile o lo están empujando?
Hace algunos días un distinguido representante del mundo capitalista expresó en la prensa escrita y oral que el país se "estaba cayendo" porque las principales actividades comerciales, sociales y económicas estaban literalmente en el suelo, en franco retroceso de sus actividades y las instituciones no funcionaban bien.
Agregó que había caído en el descrédito o no permitían hacer caminar a Chile como una república ordenada y con posibilidades de crecer en el plano económico. Además fue publicado en estos días, un artículo similar de un ex presidenciable derrotado de la derecha.
¿Es eso verdad o es una exageración? ¿Hay otros hechos que hacen pensar que es pare de la estrategia usada por la derecha más ultra para producir desconfianza que paraliza o generar el pánico escénico que ha usado siempre que ha estado en la oposición?
Creo sinceramente- a la luz de otros hechos reales- que es una permanente enumeración de hechos puntuales y con ellos se quiere inundar a los chilenos de un pesimismo inescapable como estrategia política.
La derecha económica jamás ha dejado este camino porque sabe el valor publicitario de este argumento, sea real o falso, además aprovecha su respaldo en los medios d comunicación, pero ¿tan mal estamos como para hacer posible el caos que nos anuncia y nos pronostica el acusador mayestático? ¿Tiene también razón al artículo de quién anunció su autoexilio por razones similares?
Para responder son necesarias tres condiciones.
La primera es conocer la verdad total de sus dichos.
La segunda es comparar fidedignamente con " la verdad de aquellos que tienen otra opinión".
La tercera es ponernos de acuerdo cuales son a juicio de ambos sectores lo que estimamos parámetros importantes a aquellos que lo son para ambas posiciones o de consenso.
Hay una cuarta condición que prefiero no utilizar para no agraviar el debate: la adhesión anterior del contrincante, ¿qué hizo cuando fue gobierno? ¿en democracia o dictadura?
Veamos pues algunos elementos de la discusión ¿Es importante la libertad para los chilenos? Sí, para todos. ¿Existe en nuestro país? Sí. ¿La hubo en el gobierno que respaldaban nuestros acusadores? No.
¿Es importante la elección libre de nuestras autoridades? ¿ La hay en este Chile de hoy? Sí. ¿La hubo cuando gobernaba la Dictadura que se apoyó en nuestros contradictores? No.
¿Es importante la libertad de prensa? Sí. ¿La hubo en el tiempo del gobierno que apoyaban nuestros apasionados críticos? No. ¿Habrían podido escribir contra el gobierno de Pinochet nuestros innegables opositores ? No. Este debate ad hominne es inescapable para demostrar que desde su perspectivas están equivocados y con tejado de vidrio.
Veamos otros hechos en materia económica.
Es verdad que hemos tenido aprietos como otros años en buena parte debido a la baja del precio del cobre ¿Qué se ha hecho? No sólo llorar sino que reemplazar su ingreso por otras exportaciones, específicamente, con el doble propósito de aportar un aumento de las exportaciones de la agricultura de US$ 300 a US$ 400.000 creando riqueza y empleos donde no los había, como en el Sur de Chile
Algunos cambios positivos de especial relevancia cualitativa y cuantitativamente. Desde 1990 al 2016 la educación superior subió del 25% de jóvenes en edad de recibirla al 80% y en la educación media del 40% al 95% ¿serían posibles estas cifras si el país se estuviese cayendo? Obviamente que no.
Se han reemplazado exportaciones de materias primas por exportaciones de Servicio para evitar el desempleo.¿Porqué se desconoce o se reconoce este hecho? ¿Porqué no se habla con la verdad completa.
Hay sí un elemento central que no se critica desde la oposición que es lo que más irrita a la población del país: la concentración de la riqueza que produce una brecha o rango en esa cifra que es éticamente inaceptable. Pero eso no se menciona porque los que atacan a la Nueva Mayoría son los beneficiados con ese sacrilegio económico y son los que reclaman. Hoy esa diferencia entre el más rico y el más pobre es de $ 1/2000 casi 200 generaciones , es decir desde la prehistoria. Es cosa de ver los números bancarios y los intereses generados.
Por ello debe tenerse cuidado al anunciar debacles en las cifras o instituciones de un país sin mirar todos los aspectos de institucionalidad, desarrollo y crecimiento. Cuando la verdad no es completa es falsedad.
Por ello el desarrollo del ser humano es algo más que los números. Es el alma y el cuerpo lo que importa. Es su condición de persona e individuo.
Sobre eso hablaremos después.
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