A 55 años del inicio de las relaciones diplomáticas entre Chile y China, la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Gloria de la Fuente, analizó en Efecto China la trayectoria y el futuro de un vínculo que ha trascendido gobiernos y contextos históricos, consolidándose como una de las alianzas estratégicas más importantes para el país.
La autoridad destacó el rol pionero de Chile en la región, un hecho que sentó las bases para una relación sólida y en constante crecimiento.
"Es bien importante reconocer que fuimos el primer país de América del Sur en tener relaciones y formalizar relaciones diplomáticas con China, que fue en diciembre del año 1970. Por lo tanto, creemos que aquí hay una oportunidad importante también para relevar que somos el socio más antiguo en esta región de China", explicó De la Fuente.
Un vínculo inalterable a través de la historia
La subsecretaria recordó que la relación ha permanecido "inalterable" a través de distintos períodos políticos, desde la Unidad Popular y la dictadura hasta los sucesivos gobiernos democráticos.
Este recorrido ha permitido que Chile fuera el primer país latinoamericano en apoyar el ingreso de China a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y en reconocer su estatus de economía de mercado.
Este proceso culminó con una profundización de la alianza, que hoy va más allá de lo puramente comercial. Según explicó la subsecretaria, el vínculo evolucionó significativamente.
"Elevamos el estatus a Asociación Estratégica Integral, lo que significa que nuestra colaboración no solamente está en el ámbito económico, ni en el ámbito diplomático, hemos ampliado hacia la educación, a la cultura, a las artes, a una serie de otras iniciativas que nos han permitido reforzar nuestro vínculo con China".
De lazos culturales a un presente de inversiones clave
Gloria de la Fuente también subrayó que la amistad entre ambos pueblos precede a la diplomacia formal, recordando la creación del Instituto Chileno Chino en los años 50 por figuras como Pablo Neruda y José Venturelli.
Hoy, esa relación se materializa en inversiones concretas que impactan la vida diaria de los chilenos.
"Las importantes inversiones chinas que hemos ido recibiendo en los últimos años, en materia de electromovilidad, por ejemplo, los buses eléctricos que tenemos hoy en día en distintas ciudades de Chile son buses chinos. Tenemos también un sistema ferroviario que se ha ido robusteciendo a partir de la llegada de trenes chinos, en materia de construcción de infraestructura, etcétera", detalló.
El futuro: diplomacia cultural y multilateralismo
De cara a las próximas décadas, la subsecretaria identificó la educación y la cultura como ámbitos clave para seguir fortaleciendo la relación. En ese sentido, destacó el rol de los Institutos Confucio y los programas de enseñanza del chino mandarín.
"La diplomacia cultural es una manera también de estrechar vínculos entre los pueblos, entre los países, entre la ciudadanía, y no solamente en distintos ámbitos como puede ser el ámbito de las inversiones o los negocios. Esto tiene que ver también con la proximidad entre la ciudadanía, los pueblos, una posibilidad de comprendernos en nuestras diferencias culturales", afirmó.
Finalmente, De la Fuente señaló que existe una "coincidencia muy fundamental" entre Chile y China en la defensa del multilateralismo y los valores de la globalización como herramientas para enfrentar los desafíos globales.
"China en esto tiene particularmente un rol importante porque es uno de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, por lo tanto, le toca un rol relevante en esa perspectiva", concluyó.