"No me pidió autorización para seguir usando mi trabajo. Me duele más por el vínculo que teníamos", indicó.
Julio Rodríguez, formador del exarquero nacional Claudio Bravo, sorprendió al revelar que ya no tienen mayor relación y, además acusó al otrora capitán de la selección de apropiarse de un proyecto que habían iniciado juntos para entrenar a nuevos guardametas.
El histórico preparador de arqueros de Colo Colo recordó el descubrimiento del histórico capitán de La Roja y sostuvo que mantuvo contacto con él durante varios años, aunque aclaró que "lamentablemente, hoy estamos más distanciados, pero el cariño sigue intacto".
Al ser consultado por el motivo de este alejamiento, Rodríguez aclaró que fue "por las clínicas deportivas. Cuando él todavía estaba en el Barcelona, me dijo que quería hacer algo especial en su complejo. Yo tomé esa inquietud y la organicé con todo lo que había aprendido afuera. Hicimos una clínica para 80 arqueros, algo que nunca se había hecho en Chile".
En la misma línea, relató que "hicimos varias (clínicas): en su complejo, en Iquique (...) pero después me fui a Estados Unidos. Y ahí es cuando deja de llamarme. Si él hubiese querido hacer más conmigo, bastaba con levantar el teléfono. Pero no lo hizo".
"Él siguió haciendo clínicas con el mismo método, la misma organización, pero ya sin mí. Y eso duele. Todo eso que hoy se hace, salió de mí. No es por ego, es un hecho. Es mi idea, mis programas, mi experiencia en Europa. Yo lo adapté a Chile porque él me lo pidió" agregó en conversación con En Cancha.
Frente a esto, el formador aseguró que Bravo "no me pidió autorización para seguir usando mi trabajo, ni me incluyó, ni me llamó" y si bien evitó hablar de traición, consideró que lo ocurrido "sí fue una falta de respeto. Porque está lucrando con algo que armamos juntos, basado en mis conocimientos. Y nunca se me reconoció ni se me pidió permiso".
"Lo he conversado con abogados. Me dicen que tengo todo para hacer una demanda. Pero me da pena. Sería justo, pero me cuesta mucho llegar a eso. Me duele más por el vínculo que teníamos. Lo conocí a los 12 años, caminamos juntos en lo deportivo. Éramos familia (...) No quiere hablar conmigo. Y yo no entiendo por qué. Nunca me dijo qué pasó, nunca se despidió, nunca me dio una razón. Simplemente dejó de llamarme", cerró Rodríguez.
