Liverpool venció a Wolves y quedó como puntero absoluto de la Premier League

Beneficiado por el empate de Manchester City, Liverpool aprovechó su ocasión; práctico, efectivo y ganador en su visita a Wolverhampton, donde tomó la victoria por 2-1 y el liderato con un penal cometido sobre Diogo Jota y transformado por Mohamed Salah.

La jugada clave de un encuentro lejos del nivel habitual del conjunto de Arne Slot, que sufrió por tramos contra su adversario, pero fue más certero en los momentos más oportunos, primero para adelantarse en el marcador al borde del descanso y después, cuando aún festejaba la igualdad la afición local, para rehacerse directo a un triunfo más que valioso.

Aunque Wolves es último y aún no ganó esta temporada, no es un oponente fácil. Ni cuando se repliega ni cuando sale al contragolpe ni cuando atosiga a Liverpool como lo hizo al comienzo del duelo, en el que redujo a un equipo de tal nivel a casi la nada en ataque, sin un remate ni fuera ni dentro de la portería más allá del minuto 20.

Al borde del descanso, al minuto 45+1, surgió un cabezazo de Konaté, demasiado solo en su remate, también potente en su irrupción para transformar el centro de Diogo Jota en el 0-1. Esta vez, Sam Johstone no tuvo opción. 

Dos oportunidades y un gol para Liverpool, que se complicó en el inicio del segundo tiempo hasta que le marcaron el 1-1.  Ait Nouri anotó el empate para darle vida en el encuentro a los "lobos".

Prácticamente en la siguiente jugada fue el penal que sentenció el encuentro. Un centro al área de Mohamed Salah al que corrió Diogo Jota. El agarrón fue visible de Nelson Semedo. El árbitro señaló penal, sin dudarlo, el VAR lo rectificó.

El lanzamiento desde los once metros lo aprovechó Salah para darle el liderato de la clasificación a Liverpool, un punto por encima del City y de Arsenal.