[PERFIL] Yasmani Acosta, el luchador que cumplió su sueño olímpico representando a Chile

- Revisa el especial de Cooperativa.cl de los Juegos Olímpicos de París 2024.

Yasmani Acosta Fernández cumplió su sueño olímpico y su sacrificada carrera tuvo recompensa, al ganar medalla de plata en los Juegos de París 2024, una presea inédita para el Team Chile en la lucha grecorromana.

Acosta, de 36 años, nació en Agramonte, Cuba, y desde su infancia comenzó a practicar esta disciplina. Primero probó otros deportes, como fútbol, béisbol, boxeo, pero recién a los 10 años inició su periplo como luchador. Representó con éxito al país caribeño, con medallas de oro en campeonatos panamericanos de la especialidad entre 2008 y 2011, y compartió equipo con Mijaín López, leyenda de la lucha grecorromana, multicampeón olímpico, mentor y su rival en la final por el oro.

Sin embargo, su vida tuvo un dramático giro en 2015. En los Campeonatos Panamericanos de Lucha que celebraron en Santiago, Acosta ganó medalla de bronce en la categoría 130 kilos, pero antes de competir, cuando dejó Cuba, había tomado una decisión: No regresar a su país y quedarse en Chile.

Y tomó la decisión, sabiendo el drástico castigo que recibiría: Ocho años sin poder ver a su familia, ya que durante ese período no tenía permitido ingresar al país, ya que para las autoridades cubanas, quedarse en Chile fue una "traición". 

El día que debía partir a Cuba junto a la delegación, escapó con ayuda de Andrés Ayub, luchador chileno con quien había entrenado, y comenzó su historia en nuestras tierras. Fueron muchas, y de gran peso, las razones personales para dejar Cuba, pero también estaba el sueño olímpico. Solo había un cupo en ese país y pertenecía a Mijaín López, por lo que llegar a Chile habría un nuevo horizonte: Competir en la cita de los anillos.

La odisea fue larga. Estuvo dos años trabajando como guardia de seguridad, mientras trataba de obtener los permisos para volver a los entrenamientos y poder competir. En 2017 logró la autorización internacional y empezó a representar al Team Chile, ganando una medalla de plata en los Panemericanos de Lucha y un bronce en los Campeonatos del Mundo, pese a su tiempo de inactividad.

En 2018 por fín logró la ciudadanía chilena y ese año celebró su primer gran triunfo por nuestro país, ganando el oro en los Odesur de Cochabamba.

Posteriormente, Yasmani viajó por Europa y conquisto varios "Grand Prix", llegando a cosechar cinco medallas de oro, siempre mejorando su nivel con una meta: La presentación en los Juegos de Tokio 2020 (celebrados en 2021 por culpa de la pandemia del Covid-19).

En la cita en tierras japonesas rozó el podio y terminó en cuarto lugar, pero no bajó los brazos y continuó preparándose con ganas de revancha. En los Panamericanos Santiago 2023, se colgó el bronce, pero el sueño de la medalla olímpica seguía encendido como mayor prioridad.

"Es algo que tengo muy pendiente, tengo todavía la espinita clavada y quiero sacármela", declaró Yasmani en muchas entrevistas en los últimos años, porque su sueño lo tenía claro: Tener una presea que lo instala como uno de los mejores luchadores del mundo. Y solo lo podía hacer con la bandera chilena.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de Cooperativa Deportes (@cooperativadeportes)