Los municipios de Vitacura y Huechuraba lamentaron la decisión de Cencosud de renunciar a la construcción de un mall en el límite entre ambas comunas, luego que el informe del impacto vial del proyecto fuese rechazado por la Seremi de Transportes.
El proyecto Cenco Malls de Vitacura contemplaba una infraestructura erigida al aire libre de tres pisos con locales comerciales, supermercados, un cine y estacionamientos subterráneos, entre otras cosas. Proyectaba ocupar 12,5 hectáreas.
Sin embargo, el Informe de Mitigación de Impacto Vial (IMIV) de la iniciativa, presentado por Cencosud, fue invalidado el 22 de noviembre por la Seremi de Transportes, pese a que la misma autoridad lo había aprobado hace 16 meses.
Cenco Malls "lamentó profundamente" la decisión, mientras que la Municipalidad de Vitacura valoró "la construcción de un mall de alto estándar en el sector", aunque estimó "indispensable corregir el proyecto de mitigación vial".
Desde el municipio de Huechuraba, en tanto, el alcalde Maximiliano Luksic lamentó que "un proyecto que tenía el potencial de generar empleo y ampliar el acceso a servicios no haya podido prosperar".
"Desde el primer día planteamos que se trataba de una iniciativa positiva para la ciudad, que debía ir acompañada de mayores mitigaciones proporcionales a su impacto. Como Municipalidad de Huechuraba, siempre apoyaremos el desarrollo, velando por la movilidad y la calidad de vida de nuestros vecinos", agregó.
En la misma línea, Cencosud defendió haber cumplido "de manera diligente con cada solicitud de la autoridad".
El proyecto de Cenco Malls lleva casi dos décadas con problemas relativos a su mitigación vial, ya que en septiembre de 2008 la empresa comenzó a recibir reparos al respecto.
Experto: El IMIV fue anulado sin criterios técnicos
Sergio Correa, gerente inmobiliario de la consultora Colliers, opinó que "este caso puede transformarse en emblemático en relación con la aprobación de proyectos y la certeza jurídica en relación a éstos".
"Es un problema profundo en lo que tiene que ver con la gestión urbana y la falta de estabilidad en las decisiones. Era un proyecto que cumplía con toda la normativa, que ya había obtenido permisos y que, sobre todo, contaba con un IMIV aprobado por la Seremi de Transportes hace más de un año, y que hoy la misma autoridad que lo aprobó lo anula sin criterios técnicos que lo sostengan", criticó.