La economista Andrea Repetto destacó en Cooperativa que, después de varios intentos fallidos, una reforma de pensiones esté más cerca que nunca de ser despachada a ley, y apuntó que sus eventuales dificultades podrán ser resueltas en el camino.
"Ha costado tantos años: el gobierno de Bachelet II intentó hacer estos cambios en una ocasión, el gobierno de Piñera II envió dos proyectos de ley, y (una propuesta de este tipo) nunca había avanzado tanto como ahora, teniendo un acuerdo previo", valoró la experta en Lo que Queda del Día.
Para la directora de la Escuela de Gobierno de la Universidad Católica, "esta es una gran oportunidad que tiene el país y la política para efectivamente conseguir un gran acuerdo, que nos permita una reforma que ha sido tan ansiada por la ciudadanía por tanto tiempo".
En cuanto a las críticas al contenido en las que insisten los extremos antes de la votación en la Cámara Baja, reflexionó que "hay que mirar este acuerdo con más perspectiva. Además de la perspectiva política de la dificultad de haber acordado algo en los últimos 10 años, este es un proyecto que va a aumentar las pensiones de los jubilados actuales, de las personas que están próximas a jubilarse, y de los jubilados del futuro, trae más equidad de género, y también aumenta la competencia entre las AFP, de modo que lo que ellas ganan por prestarnos este servicio a los trabajadores sea remunerado acorde a los servicios que entregan".
"Imagino que no hay nadie que diga que 'este es el acuerdo perfecto, era exactamente lo que yo quería', pero ya se ha dicho de muchas maneras que esto es lo que se pudo acordar, y consiguiendo estos tres ámbitos que acabo de describir, y quizás otras cosas adicionales, por cierto que permite aunar las visiones y entrar en un punto en que una buena parte -al menos la mayoría (de las bancadas)- puedan aprobarlo", aseveró Repetto.
"Habrá que seguir la reforma"
Detractores de la propuesta también sostienen que su aprobación abre una serie de incertidumbres, por lo que la economista observó que "los sistemas de pensiones son muy complejos, tienen muchas aristas y son muchos los riesgos que estamos tratando de proteger: la pobreza en la vejez, la longevidad, la discapacidad, la rentabilidad, la capacidad de los trabajadores de cotizar. Entonces, cuando tienes muchos aspectos y estás cambiando muchas cosas al mismo tiempo, habrá que hacer un trabajo de seguir la reforma".
"Algunas cosas van a entrar de manera gradual: por ejemplo, el aumento de la cotización y de los fondos de mayores PGU, lo que permite observar si efectivamente (se concretan) las proyecciones que se hicieron, tanto en los informes financieros respecto de los costos, y de cuáles van a ser los efectos sobre las pensiones y las comisiones de las AFP, dando un espacio para hacer los ajustes que se requieran", matizó, antes de asegurar que "es natural que los sistemas de pensiones se vayan ajustando, porque van pasando muchas cosas y son compromisos de muy largo plazo, de muchos recursos, tanto del fisco como de los trabajadores, y ahora, de los empleadores".
La experta reafirmó que "la reforma tiene las ventajas que describí, y por cierto, hay incertidumbres, porque son compromisos de tan largo plazo. Estamos haciendo estimaciones sobre qué va a pasar con las pensiones en 40 años más, y quizás la demografía cambie o pasen muchas cosas en el camino".
"Hubo cierta incertidumbre sobre la capacidad fiscal de financiar esto, y en la discusión que hubo después de la presentación del Consejo Fiscal Autónomo en la Comisión de Hacienda del Senado, se repararon y estas cosas pasaron a ser graduales, para poder observar que la realidad sea lo más cercana a las proyecciones posible, y si no, hacer las correcciones que sean necesarias en el camino", remató.