El estadounidense asegura que los encargados de la cinta lo estafaron.
Todo tras conocerse un escándalo en Malasia.
Jordan Belfort, el excéntrico estafador que inspiró la película "El lobo de Wall Street" de Martin Scorsese, ingresó una demanda en la que asegura que fue víctima de una estafa perpetrada por los productores de la cinta.
Belfort, que en la cinta fue interpretado por Leonardo DiCaprio, presentó una demanda por fraude de 300 millones de dólares en el Tribunal Superior de Los Ángeles contra Red Granite Pictures y su CEO, Riza Aziz, diciendo que no tenía idea de que financiaron la película con millones de dólares robados del gobierno de Malasia, según Variety.
Aziz enfrenta actualmente cargos de corrupción en Malasia por supuestamente malversación 248 millones de dólares de 1MDB, un fondo de desarrollo estatal. De hecho, el padrastro de Aziz, Najib Razak, fue destituido como primer ministro a raíz del presunto robo de unos 4.500 millones de dólares del fondo.
Belfort, quien cumplió 22 meses de prisión después de estafar a los inversores a principios de la década de 1990, alega que el escándalo del fondo estatal malayo ha contaminado los derechos de su historia llevada a la pantalla grande en 2013.
Según la demanda, Belfort le creyó a Aziz cuando dijo que el dinero de Red Granite provenía de fuentes legítimas.
"Belfort quedó completamente ciego al enterarse, después del hecho, de la fuente de financiación para Red Granite y la película basada en su libro, ya que los demandados le ocultaron estos actos criminales y fuentes de financiación", dice la demanda.
"Si hubiera sabido que ciertamente nunca habría vendido los derechos", expresa la demanda.
