El presidente de Argentina, Javier Milei, anunció que el próximo año reducirá "en un 90 por ciento la cantidad de impuestos", devolverá a las provincias la autonomía fiscal y avanzará en el anunciado proceso de cierre del Banco Central.
En un discurso de 35 minutos dirigido a la nación con motivo del primer aniversario de su Gobierno, el mandatario afirmó: "Mi equipo está terminando en estos días una reforma impositiva estructural que reducirá en un 90 por ciento la cantidad de impuestos nacionales, y les devolverá a las provincias la autonomía impositiva que nunca debieron haber perdido".
Como resultado de esto, presagió, "el año próximo veremos una verdadera competencia fiscal entre las provincias argentinas para ver quién atrae más inversiones".
Según Milei, la economía trasandina ya entró en una línea de "recuperación cíclica que nos está sacando del pozo en el que nos dejaron", como demuestran "la recomposición de los salarios y las jubilaciones, y la recomposición de los stocks de las empresas".
Ésa es la parte coyuntural, "la que explica el brutal crecimiento de la economía en la último trimestre", porque la parte estructural "es el ahorro realizado", que lo cifró en 15 puntos del PIB.
Ese ahorro, según Milei, es el que se "dilapidaba" y "ha sido devuelto al sector privado, lo que generará inversión y consumo".
El mandatario ultraliberal insistió en que "la bajada del riesgo país y, en consecuencia, la tasa de interés, abarata el costo del capital y, por lo tanto, va a producir un aumento directo de la inversión".
A estos factores, agregó, "se suma un tercero, que es la reducción de la carga impositiva total, ya sea por la eliminación del impuesto inflacionario y/o por la reducción de impuestos explícitos que vamos a encarar el año próximo".
Esta reforma fiscal se sumará a otras impulsadas por su administración: de pensiones, laboral, de seguridad nacional y una reforma política.
"Terminar con la inflación para siempre"
El presidente argentino también adelantó una "convergencia del tipo de cambio paralelo al tipo de cambio oficial", que ya se está viviendo desde hace algunos meses.
"Esto nos acerca cada día un poco más a la salida definitiva del cepo cambiario (restricciones que tiene el mercado de divisas argentino), una aberración que nunca debería haber ocurrido y que, con nosotros, se va a terminar el año que viene y para siempre", prometió.
El líder ultraderechista explicó que para acabar con el "cepo" y "dar una solución definitiva al problema de los stocks del Banco Central", se recurriría a "un nuevo programa con el Fondo Monetario (Internacional) y/o a través de un acuerdo con inversores privados".
Dicho esto, Milei dejó claro que se "avanzará en el proceso del cierre del Banco Central", tal y como ha prometido multitud de veces, porque así -a su juicio- se "terminará con la inflación para siempre en Argentina".
También dijo que, a partir de 2025, "todos los argentinos podrán utilizar la moneda que quieran en sus transacciones cotidianas (...). Esto quiere decir que, desde ahora, cada argentino va a poder comprar, vender y facturar en dólares o la moneda que consideren, exceptuando el pago de impuestos que, por ahora, seguirá siendo en pesos".
Javier Milei ofreció este discurso -televisado por todas las cadenas de señal abierta- rodeado por todos sus ministros y con su hermana Karina, secretaria general de la Presidencia, a su lado.