La empresa estatal Unión Eléctrica (UNE) de Cuba prevé para este sábado nuevos y largos apagones y un elevado déficit del 46% de la capacidad máxima de generación en el horario de mayor consumo.
Con esa situación, se mantendrán los largos apagones de los últimos días, cortes que desde hace meses afectan a todas las provincias del país, incluida La Habana, a veces con hasta 10 horas consecutivas sin servicio eléctrico.
Según comunicó la UNE, la capacidad de generación en el horario peak ascenderá a 2.186 megavatios (MW), mientras que la demanda máxima será de 3.200 MW, por lo que el déficit calculado rondará los 1.014 MW. Además, se calcula una afectación máxima de 1.084 MW en el horario de mayor consumo, y de 980 MW durante el día.
El servicio se afectó ayer por déficit de capacidad durante las 24 horas de día, así como durante toda la madrugada de hoy, precisó la empresa. Los cortes eléctricos -debidos a fallos y roturas en las anticuadas plantas termoeléctricas, la falta de combustible y los mantenimientos programados- son cada vez más frecuentes en el país. En julio se registraron apagones en 29 de los 31 días y en agosto la situación parece mantenerse, según datos de la UNE cotejados por Efe.
La crisis energética está empezando a azuzar el descontento social en Cuba. Ya el año pasado los apagones fueron una de las razones detrás de las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021, mientras que en los últimos días se han producido varias protestas menores, principalmente en localidades pequeñas con prolongados apagones, aunque también se han registrado en Santiago de Cuba y La Habana.
Cuba depende en gran medida del petróleo extranjero para producir energía (las termoeléctricas generan dos tercios de la electricidad) y su principal proveedor, Venezuela, ha disminuido notablemente sus envíos. El gobierno cubano aspira a reducir esta dependencia y cuenta con un plan para que en 2030 el 37% de su mix energético (algo más de 3.500 megavatios) provenga de fuentes renovables.