El analista internacional Guillermo Holzmann señaló en Cooperativa que la política exterior llevada a cabo por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump -basada en "la zanahoria y el garrote"-, está siendo "muy disruptiva y brusca", lo que obliga a los países "a ponerse creativos" para enfrentarla.
Desde que volvió a la Casa Blanca el 20 de enero, el republicano ha sacudido el tablero internacional con su retórica de "Estados Unidos primero", que se ha traducido en la imposición de aranceles, en la manifestación de intereses anexionistas y en sus controversiales propuestas para solucionar los conflictos bélicos en Medio Oriente y Ucrania.
"El sistema internacional está en un proceso de transformación: se caracteriza por el multilateralismo con elementos ideológicos de polarización, pero esto está comenzando a dejarse un poco de lado, porque estamos sometidos a lo que Trump logre sacar adelante", dijo el académico de la Universidad de Chile.
"Para esto, (el estadounidense) usa la zanahoria y el garrote y termina imponiendo las condiciones de un nuevo orden mundial con un Estados Unidos 'pacificador' -como él lo dijo- que lidera y domina el planeta, con el resto de países detrás", añadió Holzmann.
Sin embargo, esta ecuación que Trump construye "lo hace de forma tan acelerada, que pasa a ser brusca en muchos sentidos y remece todo el sistema internacional que se ha formado" desde la Segunda Guerra Mundial, sostuvo el analista.
Proyecto de Trump es "muy ambicioso"
"Trump quiere formar una ecuación con países del Medio Oriente, Rusia, China y otros, que le permita mantener un alto al fuego en la Franja de Gaza, establecer un camino a la paz en Ucrania, tener condiciones para negociar con el gigante asiático y, después, ocuparse de África", aseguró Holzmann, lo que "es muy ambicioso".
A juicio del académico, esto deja "incómodo" a los mandatarios de dichos países, porque cada uno de ellos "ha recibido de Donald Trump una propuesta o un argumento que no los ha dejado contentos del todo. Por ejemplo, Benjamín Netanyahu no tiene claro cuál es el territorio israelí reconocido por EEUU, ya que no incluye a Gaza ni a Cisjordania".
En el caso de Ucrania, la llamada entre Trump y Vladimir Putin "da cuenta de la disrupción del mandatario republicano en el escenario internacional: quienes se ocupan de las negociaciones son EEUU, Rusia, China y, eventualmente, India, pero no Europa", dijo el experto.
Asimismo, EEUU "ha dejado claro que Ucrania no puede volver a los límites fronterizos de 2014; o sea, debe ceder el territorio ocupado por Rusia, que es un área no menor. Y además, ya está establecido por Trump que el país europeo no ingresará a la OTAN", lo que puede generar roces con la Unión Europea, advirtió Holzmann.