El secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, calificó este martes a Cuba, Nicaragua y Venezuela como "enemigos de la humanidad" y los responsabilizó por la crisis migratoria en la región.
"Esos tres regímenes que existen: Nicaragua, Venezuela y Cuba son enemigos de la humanidad y han creado una crisis migratoria, si no fuera por esos tres regímenes no hubiera una crisis migratoria en el hemisferio", dijo Rubio en una conferencia de prensa en San José, acompañado del presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves.
Rubio se encuentra en una gira por algunos países de centroamérica y el Caribe tratando temas como la migración, seguridad, comercio y la influencia de China en la región.
A juicio del jefe de la diplomacia estadounidense, esos tres países han creado esa crisis migratoria, "porque son países donde su sistema no funciona".
En el caso de Nicaragua, puntualizó, "se ha convertido en una dinastía de familia con una copresidencia donde básicamente han tratado de eliminar, por ejemplo, la Iglesia católica y todo lo religioso y todo lo que pueda amenazar el poder a ese régimen".
Nicaragua es gobernada por el sandinista Daniel Ortega desde 2007 y desde hace ochos años junto con su esposa, Rosario Murillo, designada ahora "copresidenta" por una reforma a la Constitución Política.
Rubio dijo que el "régimen" nicaragüense "castiga" a los que amenazan su poder y que han visto cómo miles y miles de nicaragüenses "están huyendo de ese sistema". Y atribyó a la misma razón el caso de Cuba y Venezuela.
En contraste, indicó el diplomático estadounidense, en Costa Rica "hay más norteamericanos viviendo, que costarricenses viviendo en Estados Unidos, que es un ejemplo de lo que pasa cuando un país lo hace bien en comparación a esos países".
El secretario de Estado estadounidense llegó a la Base 2 del Ministerio de Seguridad costarricense en el Aeropuerto Juan Santamaría, procedente de El Salvador, para cumplir con una agenda de unas pocas horas y luego viajar este mismo día a Guatemala, donde continuará su recorrido por la región, que inició en Panamá el pasado sábado y concluirá el jueves en República Dominicana.