Pakistán pidió a Obama no sufrir "repercusiones adversas" con el plan para Afganistán

El Gobierno paquistaní abogó por "trabajar estrechamente" con Estados Unidos para garantizar que la nueva estrategia para Afganistán del presidente estadounidense, Barack Obama, no tenga efectos negativos para Pakistán, que teme un posible flujo de integristas hacia su territorio.

"Pakistán ha tomado nota cuidadosamente del importante anuncio hecho por el presidente Obama respecto a la estrategia de EE.UU. en Afganistán", afirma en un comunicado el Ministerio paquistaní de Relaciones Exteriores.

Islamabad "busca trabajar estrechamente" con Washington para "entender todo el significado de la nueva estrategia" y "garantizar que no habrá una repercusión adversa para Pakistán", de acuerdo con la nota.

Cancillería destacó la necesidad de "coordinar los esfuerzos" para la consecución de "objetivos compartidos".

"Pakistán está comprometido en eliminar de raíz el terrorismo de nuestra región y en avanzar en la causa de la paz y la estabilidad en Afganistán", pero "hay ciertamente una necesidad de claridad y coordinación en la aplicación de la estrategia", afirma el Gobierno.

Obama anunció el envío de 30.000 soldados adicionales a Afganistán y el comienzo de la retirada de las tropas a partir de julio de 2011.

Los refuerzos se suman a unos 100.000 soldados extranjeros -68.000 de ellos estadounidenses- desplegados ya en el país centroasiático y tendrán la misión de atajar la insurgencia y proporcionar seguridad a centros de población claves.