La empresa juguetera Miniland, radicada en la localidad alicantina de Onil (España), logró pasar a la final en los premios Toy of the Year Awards (TOTY), en la categoría 'Doll of the year', por una muñeca con vitiligo que refleja las marcas de despigmentación que sufren las personas que padecen este trastorno.
Miniland lleva más de 60 años creando muñecas inclusivas: con síndrome de Down, implante coclear y ahora con vitíligo, lo que supone "un paso más", con el objetivo de "normalizar las diferencias y fomentar la diversidad y la inclusión", explicó a EFE-TV la directora de Marketing de la compañía, Almudena Richart.
Una apuesta por lo diferente que les ha llevado este año a ser uno de los siete finalistas mundiales para conseguir el premio a la mejor Muñeca del Año.