El Kremlin se abstuvo de hablar de plazos para el arreglo al conflicto en Ucrania, pero enfatizó que Rusia y Estados Unidos llevan a cabo un "intenso trabajo" para alcanzar la paz, aunque difícilmente dará resultados inmediatos.
Frente a una pregunta sobre si Rusia comparte el optimismo de la Casa Blanca sobre la consecución de un arreglo al conflicto, el vocero de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, replicó en su rueda de prensa telefónica diaria que "ahora no diremos nada específico sobre plazos".
El emisario de EEUU Steve Witkoff, quien el pasado viernes se reunió en San Petersburgo con el presidente ruso, Vladímir Putin, se mostró optimista sobre la marcha de las conversaciones con Rusia en una entrevista con la cadena de televisión estadounidense Fox.
"Creo que podríamos estar al borde de algo que sería muy, muy importante para el mundo en general", dijo.
El vocero del Kremlin explicó que "hay que entender claramente que ahora hay un intenso trabajo entre Moscú y Washington, un trabajo que se lleva en aras de la paz".
"Desde luego este es un asunto tan complejo que difícilmente se pueden esperar resultados inmediatos, pero, sin embargo, hay que tener esperanza de que este trabajo dará resultados positivos", dijo Peskov.
En este contexto, denunció que "los países europeos continúan trabajando en aras de la guerra, y declaran su propósito de continuar apoyando a Ucrania y al régimen de Kiev en su afán de continuar la guerra".
Mientras, el presidente de EEUU, Donald Trump, dijo que existía un "deadline (plazo) psicológico" en el caso de Moscú para aceptar el fin de hostilidades en Ucrania.