Las autoridades japonesas encontraron un cadáver en el monte Rausu, en la isla de Hokkaido (norte), donde buscaban a un veinteañero desaparecido tras ser atacado y arrastrado por un oso.
La policía trata de identificar los restos hallados en la misma zona donde el jueves un joven fue sorprendido por un oso mientras hacía senderismo junto a un amigo, quien salió ileso tras presenciar el incidente y dio la voz de alarma.
El hallazgo del cadáver se produjo en la misma zona donde horas antes los equipos de búsqueda encontraron varias pertenencias del desaparecido, entre ellas su billetera, una camiseta ensangrentada, un reloj, una gorra, pantalones rotos, zapatos y una mochila, según detalles de la investigación publicados por la cadena TBS.
Los rescatistas también encontraron manchas de sangre en árboles cercanos y señales de que algo había sido arrastrado.
El incidente tuvo lugar alrededor de las 11:00 horas del jueves (22:00 horas del miércoles en Chile), cuando otro joven acompañante de la víctima alertó a la policía del encontrón con el oso en un paraje ubicado a una altitud de unos 550 metros en el monte Rausu, ubicado en la península de Shiretoko, un paraje Patrimonio de la Humanidad.
La víctima, que caminaba más adelante, se topó con el animal, que lo atacó y arrastró bosque adentro, según el testimonio de su acompañante, que llegó a golpear al oso para intentar hacer que soltara a su compañero, sin éxito.
Varios cazadores participaron en las útlimas horas en las labores de búsqueda del desaparecido, durante las que se exterminó a una osa y tres oseznos que aparecieron por la zona. Se desconoce si fue concretamente este el animal que atacó al hombre.
Es la primera vez que un excursionista es atacado por un oso desde que la península de Shiretoko fue declarada patrimonio en 2005.
El suceso tuvo lugar en un área cerrada a los senderistas por la presencia de estos animales, de acuerdo a los medios locales, que informaron de que otras personas fueron sacadas del monte en helicóptero.
Incremento en los ataques a humanos de osos
Según las redes sociales de la Fundación de la Naturaleza de Shiretoko, recientemente algunos osos pardos se han acercado a los excursionistas a apenas 3 o 4 metros, y se han registrado casos en los que los animales continuaron siguiendo a las personas incluso después de utilizar espráis de gas pimienta, un repelente contra esos animales que se recomienda llevar a los senderistas.
Esto, se suma al ataque mortal ocurrido el mes pasado contra un repartidor de periódicos en la localidad de Fukushima, en el sur de Hokkaido, y municipios vecinos también han reportado daños a cultivos supuestamente causados por osos.
Las autoridades niponas han tomado algunas medidas en los últimos años ante el incremento de los ataques a humanos de osos, entre ellas una reforma de la normativa de protección animal, que permite a sus municipios autorizar el disparo preventivo a osos.
Esta reforma se aprobó el pasado febrero tras una cifra récord de 219 ataques a personas en el año fiscal de 2023 (hasta marzo de 2024), que dejaron seis muertos.
Muchos expertos creen que el número creciente de encuentros con osos en Japón responde a los efectos del cambio climático, que hace escasear los frutos e insectos de los que se suelen alimentar y los empuja a aventurarse en entornos poblados en busca de sustento.