El príncipe Harry aceptó este miércoles un acuerdo extrajudicial con News Group Newspapers (NGN), la filial británica del magnate Rupert Murdoch y dueña de The Sun, por el que la empresa admitió por primera vez una intrusión ilegal en su vida y le pagará una "indemnización sustancial".
Como parte del acuerdo, calificado de "victoria monumental" por los demandantes, NGN pidió perdón por las escuchas ilegales del ya extinto News of the World y por actividades ilícitas en The Sun, que atribuyó no a periodistas sino a detectives subcontratados.
Así, el grupo mediático ofreció "una disculpa completa e inequívoca" al príncipe "por la grave intrusión de The Sun entre 1996 y 2011 en su vida privada", lo que comprende "actividades ilegales llevadas a cabo por investigadores privados".
También se disculpó "por el espionaje telefónico, la vigilancia y el uso indebido de información personal por parte de periodistas e investigadores privados contratados por éstos en News of the World", clausurado por mala praxis en 2011.
"Reconocemos y ofrecemos disculpas por la angustia causada al duque y el daño infligido a las relaciones, amistades y familia, y hemos acordado pagarle una indemnización sustancial", afirmó NGN.
En un comunicado posterior a la audiencia judicial, News Group Newspaper aclaró que en el acuerdo no reconoce las alegaciones de encubrimiento corporativo -que iba a rebatir en el pleito- y que nunca hubo en The Sun "intercepción de mensajes de voz" para obtener exclusivas informativas.
"Un hito"
El abogado defensor del príncipe señaló que esta admisión supone un hito para las más de 1.500 personas que también se vieron afectadas por los abusos de la compañía, entre ellos los actores Hugh Grant y Sienna Miller, y que se vieron forzados a pactar antes de poder llegar al fondo del asunto.
Según el defensor, "la verdad que ahora ha sido expuesta es que NGN contrató ilegalmente a más de 100 investigadores privados durante al menos 16 años en más de 35.000 ocasiones".
"Esto sucedió tanto en The Sun como en News of the World, con el conocimiento de todos los editores y ejecutivos, hasta la misma cúpula de la empresa", sostuvo.
El duque de Sussex y el parlamentario laborista Tom Watson instaron en su comunicado a la policía y al parlamento a investigar "no solo la actividad ilegal finalmente admitida, sino también el perjurio y los encubrimientos".