Londres rindió homenaje al mediodía de este viernes (11:00 horas GMT) a las víctimas de los cuatro atentados terroristas cometidos hace un año por islamistas suicidas con dos minutos de silencio que se extendieron a todos los rincones del Reino Unido.
El inicio del homenaje lo marcaron las campanadas del "Big Ben", mientras que el final lo hicieron las campanas de la catedral de San Pablo.
Sobrevivientes y familiares de los fallecidos en los atentados de pasado 7 de julio, que cegaron 56 vidas, incluidas las de los cuatro terroristas suicidas, guardaron silencio en los lugares donde explotaron las bombas.
A ellos se unieron millones de empleados de las oficinas, fábricas y comercios de la capital británica, así como numerosos ciudadanos anónimos que quisieron honrar a las víctimas.
El transporte público de la ciudad también quedó paralizado durante los dos minutos, aunque la vida siguió su ritmo por las calles de Londres, como la céntrica Oxford Street, inundada de turistas a estas alturas de año, muchos de ellos ajenos al homenaje.
La reina Isabel II de Inglaterra y su hijo, el príncipe Carlos, acompañados de sus respectivos cónyuges, observaron los dos minutos de silencio en la catedral de Saint Giles de Edimburgo.
Por su parte, el primer ministro británico, Tony Blair, se unió a los trabajadores de los servicios de emergencia de Londres en el recuerdo a las víctimas.
El torneo de tenis de Wimbledon también paró la actividad de sus pistas durante dos minutos.
El 7 de julio pasado, tres bombas explotaron en tres convoyes del Metro de Londres y una cuarta en un autobús urbano de la línea 30 en la plaza de Tavistock Square, próxima al Museo Británico.
Aparte de los dos minutos de silencio, los familiares de las víctimas desvelaron placas conmemorativas, mientras que el alcalde de Londres, Ken Livingstone, en compañía de la ministra británica de Cultura, Tessa Jowell, depositaron flores en los escenarios de los atentados.
La jornada de luto concluirá la tarde de este viernes en una ceremonia en el Regent's Park, en la que se leerán en voz alta los nombres de los fallecidos en los ataques terroristas y también depositarán flores. (EFE)