"No nos achiquen la buena noticia liberadora de Jesús refiriéndonos solamente a uno de los muchos temas de los que nos tenemos que hacer cargo", dijo Pablo Walker.
Pablo Walker se refirió al encuentro con el papa en el Santuario del Padre Hurtado.
El capellán del Hogar de Cristo, Pablo Walker, aseguró que en la conversación privada que tuvo el papa Francisco durante la tarde de este martes en el Santuario del Padre Hurtado con los integrantes de la Compañía de Jesús, de la que ambos forman parte, no se tocó el tema de los abusos contra menores sino que más bien la reparación de derechos, la dignidad y el cuestionamiento a la "dictadura del egoísmo".
Walker respondió así ante las numerosas preguntas sobre el obispo de Osorno Juan Barros, mano derecha de Karadima y sindicado como encubridor del ex párroco, quien participó de la misa en el Parque O'Higgins y en el encuentro del papa con religiosos y obispos en la Catedral Metropolitana.
"No nos achiquen la buena noticia liberadora de Jesús refiriéndonos solamente a uno de los muchos temas de los que nos tenemos que hacer cargo. Espero que de este viaje no solamente queden fotos, que es lo menos interesante, sino que una agenda ciudadana, política, eclesial", dijo Walker.
"Soy súper enfático, me interesa mucho más la potencia revolucionaria del mensaje de Jesús que qué va a pasar en las conversaciones con monseñor Barros", añadió el capellán del Hogar de Cristo.
El capellán además recalcó que "no se tomó el tema de los abusos porque hay aspectos fascinantes del desafío que nos plantea el país en temas de reparación de derechos y de dignidad que son de una trascendencia, de una urgencia, con los que nos tenemos que sincerar y para tener autoridad para hacer ese trabajo requerimos conversiones personales y cierta lucidez", resaltó el líder espiritual del Hogar de Cristo.
"Eso es lo que el papa Francisco está tratando de hacer en el país, no solamente de estar respondiendo a lo que la agenda corta está pidiendo, el tema que a cada uno desde nuestro distinto grupo de interés nos parece más clave, si no si estamos dispuestos a cuestionar qué entendemos por dignidad en nuestro país, no como mercancía, vivimos otra dictadura, no la militar de hacer 30 años, sino que la dictadura del egoísmo, donde todas las relaciones son transaccionales, donde la vida se compra y se vende, eso el papa Francisco lo quiere cuestionar radicalmente", enfatizó.
Cura Montes: Hubiese sido preferible que Barros no estuviera en el P. O'Higgins
En tanto, el sacerdote Fernando Montes, que también participó en el encuentro privado de jesuitas con el papa, lamentó que el tema del obispo de Osorno se tome la agenda, a propósito de las diversas protestas que han realizado los laicos de la ciudad.
De todos modos, dijo que hubiese sido mejor que Barros no asistiera a las actividades, para evitar estos cuestionamientos durante la visita papal.
"Estuve concelebrando en el Parque O'Higgins y después vino la prensa y les dije que no vi a Barros, ciertamente no fue percibido por nadie. Barros no fue figura central y ojalá que la prensa nos ayude a enfrentar el problema. Yo creo que hubiera sido preferible, dado los resultados, que él no hubiera estado", dijo Montes.
Además, espera que el tema Barros no sea el centro de esta visita papal, aunque considera que esa situación debe ser resuelta.
"Les suplico que nos ayuden a que no sea ese el único tema y el tema central (...) No he dicho que no se diga, (sino) que no lo hagamos tema único y central, y más importante. El papa, (y) lo que nos ha dicho en la cárcel, Dios quiera que sea el centro y que no se nos olvide este tema de Barros porque tenemos que enfrentarlo", comentó.
"No quiero pedir que esto no se toque, pero que le demos el lugar que corresponde en este momento que hay que sacarle el jugo al papa, y ojalá que el papa nos ayude y que le pida a los obispos que este tema termine resolviéndose", concluyó.
