La Fiscalía Oriente logró un veredicto condenatorio contra tres carabineros acusados de participar en la agresión a Moisés Órdenes, ocurrida el 21 de octubre de 2019 en Plaza Ñuñoa, en el contexto del estallido social.
Para el exoficial de Fuerzas Especiales Martín Blanc, el Ministerio Público solicitó una pena efectiva de 10 años y un día por apremios ilegítimos y otros tres años por obstrucción a la justicia. En tanto, para los otros dos funcionarios involucrados se pidió una condena de tres años de cárcel por obstrucción y falsificación de instrumento público.
"Con esto culmina al menos una primera etapa: hoy fueron condenados los tres últimos funcionarios policiales que participaron en estos hechos, tras una investigación extensa con la colaboración de la PDI y de Carabineros", señaló el fiscal de Alta Complejidad Oriente, Jorge Martínez.
En la audiencia, el fiscal solicitó prisión preventiva para Blanc; sin embargo, la medida fue rechazada por el Tercer Tribunal Oral en lo Penal. La lectura de sentencia quedó fijada para el próximo 9 de septiembre.
Esta condena se suma a otras nueve ya dictadas en procedimientos abreviados contra integrantes del mismo piquete, quienes fueron sentenciados previamente por obstrucción a la justicia y falsificación de instrumento público.
Con ello, ya son 12 los carabineros condenados en total por su participación en el caso Órdenes, uno de los episodios más emblemáticos de violencia policial en el marco del estallido social.
INDH valoró condena, pero espera que sentencia "sea proporcional"
La jefa metropolitana del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Beatriz Contreras, expresó que el veredicto "es positivo, por cuanto todos los funcionarios involucrados en estos graves hechos han sido condenados; algunos en procedimiento abreviado, otros en juicio oral".
Sin embargo, añadió que ahora "quedan a la espera de la sentencia", que estiman que "sea proporcional a la gravedad de lo ocurrido y al daño causado".
"Sabiendo que el tribunal considera que esto no es un delito común, sino violaciones a los derechos humanos, nos parece bastante positivo", valoró Contreras.