En El Diario de Cooperativa, el ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, abordó este lunes la situación en la frontera norte con Perú tras el despliegue militar decretado por el Gobierno de transición de José Jerí, señalando que "el flujo migratorio de egreso (desde Chile), de salida, es un flujo migratorio normal" y que los ingresos irregulares "han disminuido significativamente".
El secretario de Estado recordó que la zona entre Arica y Tacna es de "mucho flujo" debido al tránsito habitual de chilenos que cruzan la frontera para almorzar o hacer compras. No obstante, reconoció que el despliegue militar peruano provoca ciertas restricciones de movilidad, siendo la preocupación por la migración irregular la "razón bastante obvia y natural" de Perú para esta acción.
Cordero puso en duda un eventual "efecto Kast"; es decir, que las amenazas del candidato presidencial opositor contra los migrantes irregulares estén provocando un aumento en la cantidad de los que quieren irse de Chile:: "La verdad, no lo sé. Por lo menos nosotros no tenemos evidencia de eso, porque el flujo se sigue comportando como tal". En cambio, aprovechó el contexto para enfatizar la necesidad de colaboración regional para enfrentar el fenómeno migratorio. "No hay crisis migratoria que usted pueda resolver en zonas fronterizas sin la colaboración de sus vecinos", afirmó.
Finalmente, el ministro explicó que la reunión del Comité Binacional de cancilleres, si bien se enmarca en la programación habitual, es necesaria tras la decisión de Perú. Señaló que existe una preocupación común en la región sobre posibles flujos migratorios adicionales, especialmente si el conflicto de Venezuela con Estados Unidos se resuelve con conflicto interno, para lo cual "Chile y el resto países de la región también tienen que estar preparados".