Un bus del transporte público metropolitano se incendió este jueves mientras avanzaba por la Avenida Recoleta en dirección al sur.
La máquina iba con 20 pasajeros a bordo y el conductor estacionó a la altura de María Graham, frente al Cementerio General, y los hizo bajar al advertir que salía humo de la parte inferior.
Poco después, los mismos pasajeros lo alertaron a él, a gritos, de que la máquina estaba envuelta en llamas.
"Cuando cierro mi puerta y empiezo a comunicarme con la empresa, salió un pasajero corriendo y me golpeó la puerta (y me dijo): '¡Oiga, oiga, bájese, que se está quemando el bus'", relató el micrero a la prensa.
"Claro, yo mire para atrás y el bus ya se estaba incendiando... Abrí la puerta, no alcancé a tirar el bolso y se quemó altiro (la máquina)... A los que salvé yo me salvaron a mí", reflexionó el trabajador.
Bomberos controló posteriormente el fuego, sin que se registraran personas lesionadas.
El incidente provocó, no obstante, un enorme taco en ambos sentidos de la citada avenida.