El Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Andalién Costa anunció este miércoles un plan de seguridad a corto plazo para facilitar el retorno a clases en el colegio Nuevos Horizontes, de la comuna de San Pedro de la Paz, donde la semana pasada se produjo una balacera que dejó a tres estudiantes heridos.
Con el objetivo de idealmente reabrir el establecimiento de aquí al viernes, se dispusieron algunas medidas inmediatas, como la instalación de cámaras con reconocimiento facial y la llegada de guardias privados para controlar el acceso.
"Vamos a mejorar la reja perimetral: son casi 450 millones de pesos de inversión en el uso de una reja de alto estándar; y mejorar las cámaras: hay 10 cámaras, vamos a sumar dos y también vamos a trabajar con el sistema de reconocimiento facial", detalló el director del SLEP Andalién Costa, Ramón Jara.
En cuanto a la contratación de guardias, la autoridad explicó que "vamos a establecer un protocolo que permita controlar el perímetro con personas que sean ajenas al establecimiento: pedirles el carnet y así, garantizar la seguridad".
El requerimiento de la cédula de identidad además se replicará en los 96 establecimientos educacionales ubicados en las comunas de San Pedro de la Paz, Coronel, Lota y Santa Juana, que pertenecen al mentado SLEP.
De momento, el delegado presidencial del Biobío, Eduardo Pacheco, destacó que el retén móvil ya emplazado cerca del colegio tras la balacera "ha dado una sensación de seguridad muy importante" a estudiantes y apoderados, dado que Carabineros "trabaja directamente con el plan Calles sin Violencia en esta zona".
"Lo que viene es el proyecto de inversión, que tiene que ser rápido, durante los próximos meses. Se está reforzando también el trabajo de los guardias, que era otro de los compromisos. Esto tiene que ser con sentido de urgencia", enfatizó la autoridad regional.
Por su parte, la directora del colegio Nuevos Horizontes, Carla Chandía, aseveró que "comprendemos a las familias que aún se sienten inseguras. A medida que se vayan cumpliendo los compromisos asumidos, y se restablezca la confianza, iremos avanzando juntos", antes de reafirmar que "las clases se mantienen suspendidas, medida que se irá actualizando continuamente, y atendiendo al actual contexto".
"Como comunidad educativa, estamos profundamente afectados. Nadie está preparado para vivir una situación como esta. Hacemos un llamado a todas las familias, a toda la comunidad a apoyarnos. Aunque este hecho ha sido un episodio muy doloroso, y sabemos que este suceso será difícil de olvidar y sobrellevar, también sabemos que somos garantes del bienestar y la seguridad de sus hijos e hijas", reflexionó la educadora.