El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, es un "dictador" y sus declaraciones, en las que llamó "payasos" a los mandatarios de Chile y Colombia, Sebastián Piñera e Iván Duque, respectivamente, muestran "insolencia, descalificación y falta de respeto", manifestó este lunes el Gobierno.
Las palabras del presidente cubano "reflejan la insolencia, descalificación y la falta de respeto hacia presidentes democráticos del dictador Díaz-Canel, que apoyando a otro dictador, como Nicolás Maduro, sale a ofender", dijo hoy a la prensa la ministra secretaria general de Gobierno, Cecilia Pérez.
La vocera comentó que tanto Díaz-Canel como Maduro tienen el común que "reprimen a su pueblo, violan los Derechos Humanos y no permiten la libertad de expresión ni de información" y que, por lo tanto, entiende sus palabras como "parte de la insolencia propia de un dictador".
Díaz-Canel calificó como "payasos" a los mandatarios de Colombia y Chile por haber participado en el intento de envío de ayuda humanitaria a Venezuela desde la localidad fronteriza colombiana de Cúcuta.
"Ayer parecían payasos un grupo de presidentes en la frontera colombiana", expresó Díaz-Canel, que asumió el poder en abril en reemplazo de Raúl Castro.
La ministra chilena dijo que el apoyo que ha dado Piñera al presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, "ha sido el correcto" y que es "es consecuente" con la voz de Chile en distintos escenarios internacionales "cuando se trata de defender la democracia en cualquier parte en la se vulneren Derechos Humanos, como en Venezuela, Nicaragua o Cuba".
"La fuerza de la unión de los líderes democráticos es la que produce los cambios en países en los que las dictaduras flagelan las libertades de sus compatriotas", dijo Pérez.
Por otro lado, Pérez valoró la condena que hizo este lunes la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y expresidenta de Chile, Michelle Bachelet, del excesivo uso de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad venezolanas y grupos progubernamentales en las fronteras de Venezuela.
"Creemos que en esto ya no se aceptan ambigüedades, ni de la izquierda chilena ni de la izquierda mundial. Somos democráticos o apoyamos a dictadores", comentó Pérez.
Según distintas fuentes, los disturbios en las fronteras de Venezuela dejaron este fin de semana por lo menos cuatro muertos, cerca de 300 heridos, mientras que la vicepresidenta colombiana, Marta Lucía Ramírez, confirmó que más de 120 miembros de las Fuerzas Armadas venezolanas han desertado.
Venezuela vive una situación de inestabilidad política desde el 10 de enero, cuando Maduro volvió a tomar posesión del cargo de presidente tras imponerse en las elecciones de mayo pasado, no reconocidas por parte de la comunidad internacional.
La tensión se incrementó desde que el pasado 23 de enero Guaidó, jefe del Parlamento venezolano, se adjudicara las competencias del Ejecutivo como presidente encargado del país por considerar ilegítimo a Maduro.
Esta acción aceleró la crisis política en Venezuela, debido a que, además, buena parte de la comunidad internacional, como Estados Unidos y varios países europeos y latinoamericanos, han dado su respaldo a Guaidó y presiona para que se convoque a elecciones.