El analista internacional Gilberto Aranda dijo que la cumbre progresista "Democracia Siempre", que el Presidente Boric celebrará en La Moneda junto a sus homólogos de Brasil, Uruguay, Colombia y España, "seguramente" será seguida con lupa por Donald Trump.
En menos de 24 horas el Mandatario recibirá a los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil), Gustavo Petro (Colombia), Yamandú Orsi (Uruguay) y Pedro Sánchez (España), con el objetivo de "avanzar en un posicionamiento compartido en favor del multilateralismo, la democracia y la cooperación global", dijo Presidencia.
Como el evento se desarrolla en medio de "un desorden global" marcado por el avance de la ultraderecha y la inminente entrada en vigencia de los aranceles de Estados Unidos, Aranda -académico del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile- valoró la iniciativa.
"Es un escenario de desglobalización, de desorden global. Creo que es importante reunirse entre los defensores de las democracias plurales y debatir sobre la importancia de no avasallar a la minoría. Los cordones sanitarios (ante la ultraderecha) no han funcionado y hay que abrir la discusión", defendió Aranda en declaraciones a la agencia de noticias EFE.
Sin embargo, el analista subrayó que "seguramente" la administración estadounidense seguirá con lupa el encuentro, tal como hizo con la reunión de los BRICS en Brasil de principios de mes. Pese a ello, indicó que "las herramientas de presión de Trump y su chantaje político no pueden significar la inmovilidad de quienes piensan que la democracia plural y abierta es una forma de vida".
Por su parte, la académica de la Universidad de Concepción Paulina Astroza sostuvo que la cumbre puede ser una buena oportunidad para que el progresismo "haga autocrítica, se autodefina y piense qué es ser progresista en el mundo de hoy".
"El progresismo debe ser consecuente entre el discurso y la acción y no siempre lo ha sido. Tiene que analizar por qué tanta gente que antes optaba por opciones de izquierda y centro-izquierda las está abandonando", dijo Astroza a EFE.
"Lejos de ser un gesto aislado o simbólico"
Boric, Lula, Petro, Orsi y Sánchez compartieron una columna de opinión en El Mercurio, en la que defendieron que la cumbre está "lejos de ser un gesto aislado o simbólico" y que se trata de "una iniciativa que busca defender la democracia como un bien común".
"En un mundo cada vez más polarizado, como líderes progresistas tenemos el deber de actuar con convicción y responsabilidad frente a quienes pretenden debilitar la democracia y sus instituciones", sostuvieron los mandatarios.
"La democracia exige que seamos capaces de condenar las derivas autoritarias y, a la vez, hablar en positivo, proponiendo reformas estructurales para enfrentar la desigualdad en nuestros países y el mundo. La historia nos ha demostrado una y otra vez que la democracia es el mejor camino posible para garantizar la paz, la cohesión social y las oportunidades para todos", agregaron.
Por lo tanto, "impulsar estrategias comunes en favor del multilateralismo, el desarrollo sostenible, la justicia social y los derechos humanos resulta un imperativo ético y político", dijeron.
"Hoy nos reúne la certeza compartida de la necesidad de mejorar la respuesta del Estado a las demandas de nuestros pueblos y gobernar con eficacia, con justicia, con derechos, con democracia siempre. Y con la convicción de que defender la democracia en estos tiempos difíciles no es solo resistir y proteger, sino proponer y seguir avanzando", cerraron los jefes de Estado.