Tomás Leighton, director ejecutivo del think tank Rumbo Colectivo, ligado al Frente Amplio, aseguró este lunes en El Primer Café que el rechazo mayoritario del mundo político hacia el debate del aborto libre obedece a su carácter "pechoño e hipócrita".
El sociólogo defendió en Cooperativa la decisión del Gobierno de ingresar dicho proyecto de ley al Congreso esta semana, a días de la última Cuenta Pública de Gabriel Boric, y negó que su afán sea simplemente comunicacional.
"Estamos en vísperas de una nueva Cuenta Pública, este domingo 1 de junio, y en ese momento toda la opinión gira en torno a cuál es el porcentaje de cumplimiento que tiene el Gobierno sobre su programa, y hay dos dos maneras de cumplir las cosas: por la vía administrativa y por la vía legislativa", expuso Leighton.
Recordó, seguidamente, que una de las promesas del programa de Boric era "legalizar el aborto, estableciéndolo como una prestación de salud garantizada y dotando a los centros de salud de los métodos recomendados de evacuación uterina".
Ley de aborto, "compromiso con mujeres de sectores populares"
En opinión del intelectual frenteamplista, "lo que está haciendo el Gobierno es cumplir un compromiso presidencial" respecto a un proyecto de ley que se había dilatado" a la espera del reglamento del aborto en tres causales.
"Yo aquí no veo un tema comunicacional. Lo que veo es un compromiso con las mujeres de sectores populares, que no creen que el aborto es un tema de minorías, que no creen que sea un tema de gente privilegiada, sino que se trata de ellas, que muchas veces están obligadas a abortar en las peores condiciones posibles, de forma clandestina, sin las garantías sanitarias", señaló Leighton.
Apuntó además que "este Gobierno es elegido (en 2021), en gran parte, por mujeres de sectores populares que se levantaron no solamente en contra de la alternativa que representaba en ese entonces José Antonio Kast, sino que también por sus derechos. Entonces, para mí esto no es un tema de una jugarreta comunicacional, y tampoco es un tema de élite".
"Al revés, yo creo que lo elitista es pensar que hablar de este tipo de derechos solamente le importa a la gente privilegiada. Yo pienso que las élites, en general, tienden a no querer hablar de esto porque son pechoñas y, muchas veces, hipócritas. A mí me parece de todo sentido que el Gobierno insista con ese compromiso, y enhorabuena que haya gente con convicción que lo defienda", sentenció el líder de Rumbo Colectivo.