Fallo histórico en Brasil: Forzar tarjetas amarillas no constituye crimen penal
El máximo tribunal concedió un habeas corpus al futbolista Igor Cariús, estableciendo un precedente sobre la manipulación de resultados y las apuestas deportivas.
El máximo tribunal concedió un habeas corpus al futbolista Igor Cariús, estableciendo un precedente sobre la manipulación de resultados y las apuestas deportivas.
La Corte Suprema de Brasil determinó que un futbolista no puede ser procesado penalmente por manipulación de resultados basándose únicamente en haber forzado una tarjeta amarilla. La Segunda Sala del tribunal aceptó el recurso de la defensa de Igor Cariús y suspendió la acción penal en su contra por hechos ocurridos cuando jugaba para Cuiabá en el Campeonato Brasileño de 2022.
Los magistrados consideraron que, aunque la conducta es reprobable, no encaja en el tipo penal de la Ley General del Deporte.
El fallo se resolvió por dos votos contra uno, siendo decisiva la postura del magistrado Gilmar Mendes. El juez argumentó que provocar una amonestación "no es capaz de alterar o falsear el resultado de una competición deportiva", requisito indispensable para que exista delito, según la legislación vigente. Aunque la Fiscalía acusó a Cariús de recibir 30.000 reales de apostadores, el tribunal concluyó que la intención de beneficiar apuestas no configura crimen si no impacta el marcador final.
A pesar de librarse del juicio penal, el lateral ya cumplió una sanción deportiva de un año impuesta por el Tribunal Superior de Justicia Deportiva. Este fallo sienta un precedente importante, pero no se aplica automáticamente a otros casos similares, como la investigación contra Bruno Henrique de Flamengo, quien enfrenta acusaciones directas de fraude. La decisión revoca la postura anterior del Superior Tribunal de Justicia, que consideraba que las tarjetas sí podían influir en el torneo como criterio de desempate.