Gobierno nombró a Benito Baranda como coordinador de la visita del papa Francisco

La Presidenta Michelle Bachelet nombró al psicólogo Benito Baranda, ex director social del Hogar de Cristo, como coordinador del Estado de Chile para la visita que realizará el papa Francisco en enero del próximo año.

En conversación con El Primer Café, el actual presidente de América Solidaria recordó que no ha aceptado otros cargos públicos, pero en este caso espera que su colaboración ayude a que la visita del pontífice sea un éxito, admitiendo además que prevé un fuerte impacto en el país, donde ser abordarán temas "dolorosos" para el país.

"Yo creo que es una visita eclesiástica con impacto político, es una visita de carácter pastoral, como lo hizo recientemente en Ecuador, Bolivia y Paraguay, y creo que va a tener un impacto fuerte", dijo Baranda.

"El papa se va a meter en los temas dolorosos de Chile. Uno de los temas dolorosos de Chile es la incapacidad que hemos tenido para integrarnos culturalmente, particularmente con el pueblo mapuche, y ésa es una herida que tenemos hace mucho tiempo", reflexionó Baranda.

El papa visitará La Araucanía e Iquique, donde se tratarán dos temas complejos, como la situación que ocurre con los mapuche y la inmigración, ante lo cual el coordinadar espera que el papa aporte, de alguna manera, en la resolución de los conflictos.

"De lo que había escuchado, históricamente el papa siempre había querido visitar el territorio mapuche o los pueblos originarios y vincularse también a los inmigrantes. Ese tema no lo hemos sabido resolver en Chile y, si el papa nos puede dar una mano, puede traer algo de esperanza", comentó.

"El tema de los inmigrantes es un tema grave para Chile, tenemos una ley obsoleta, a través de procesos administrativos el Estado ha tratado de resolverlo, pero tenemos una ley que no nos sirve para lo que está ocurriendo hoy día con la inmigración". En definitiva, pueblos originarios y migrantes "son dos áreas en las cuales él nos puede dar un empujón", añadió.

Bachelet anunció que Benito Baranda será el coordinador del Estado para la visita del papa Francisco a Chile: https://t.co/ZjTVrJQrkI

— Cooperativa (@Cooperativa) 21 de junio de 2017

El obispo auxiliar de Santiago, Fernando Ramos, compartirá labores con Baranda, pero como coordinador de la iglesia chilena para la visita del papa.

En conversación con El Diario de Cooperativa comentó que el plazo de siete meses para preparar la visita -a diferencia de los dos años que tomó la preparación de la venida de Juan Pablo II en 1987- tendrá que alcanzar.

"Siete meses nos tienen que alcanzar. Pondremos todo nuestro esfuerzo para que sea una visita hecha bien. Es más corta que la de Juan Pablo II, que fueron seis días, aquí serán tres días, se van a visitar menos lugares y el ritmo del papa es más pausado por razones evidentes de su edad", explicó Ramos.

Además, sostuvo que todo el proceso para lograr esta visita ha sido extenso, pues comenzó en 2013, desde el momento en que Jorge Bergoglio fue nombrado sumo pontífice de la Iglesia Católica.

"Éste ha sido un proceso bien largo. Apenas Francisco fue elegido papa, ya algunos representantes de la iglesia chilena le manifestaron su profundo interés que visitara nuestro país", comentó el también secretario general de la Conferencia Episcopal.

"Hace dos años todos los obispos de Chile le mandamos una carta y de manera unánime le demostrábamos que queríamos que él viniera. Por otro lado, tengo entendido que el Gobierno también entregó una invitación formal para que visitara el país", detalló.

Asimismo, Fernando Ramos relató que "en la visita que hicimos en febrero de este año a Roma volvimos a tratar este tema, tuvimos dos largos encuentros con él y ya se empezaba a perfilar el interés del papa de venir a Chile, había que buscar la fecha más adecuada de acuerdo a su agenda y con qué otro y otros países podía unirse esta visita".

"Osorno sufre por tonta", fue la polémica frase que el papa Francisco emitió en 2015 por los cuestionamientos al nombramiento de Juan Barros como obispo de la ciudad, quien es sindicado como cómplice de Karadima y rechazado por parte de la comunidad osornina.

Para el sacerdote Fernando Ramos ese conflicto está superado y espera que no existan manifestaciones.

"Esperamos que no (haya protestas), están todos invitados a participar en nuestras celebraciones, con un espíritu de participación en los actos litúrgicos, de acogida y también de saber escuchar lo que el santo padre quiere decir, creemos que no habrá ninguna exacerbación (...) Yo creo que es un tema cerrado", manifestó al respecto.

No obstante, esto fue descartado por los laicos de Osorno y su vocero, Juan Carlos Claret, adelantó que preparan manifestaciones públicas y recolección de firmas para hacer llegar sus cuestionamientos al máximo representante de la Iglesia Católica.

"¿Qué pasa con Osorno con el problema que él mismo creó y que él mismo decidió mantener? Que ellos digan que el problema está cerrado no sorprende, lo que hacen los obispos es ser fieles a lo que dice su jefe el papa", manifestó Claret.

"Quisiéramos evitar cualquier exacerbación si es que ellos nos dan instancias y garantías que el papa Francisco se va a referir al tema de Osorno y nos va a poder recibir, si no, nosotros nos vamos a manifestar públicamente", recalcó.