Por cerca de cinco horas, el gobernador metropolitano, Claudio Orrego, declaró este martes como imputado en la Fiscalía Oriente, en el marco de la causa derivada de un informe de Contraloría, que advirtió un eventual mal uso de fondos del GORE en beneficio de su campaña a la reelección.
Si bien se esperaba que concurriera a esta diligencia el jueves 19 de junio, esta se adelantó: "Por temas de agenda, ambos concordamos que fuera hoy la declaración", indicó la autoridad regional a la prensa.
En la última jornada, personal de Carabineros y del Ministerio Público incautó un teléfono y un computador pertenecientes a Orrego, así como dispositivos electrónicos utilizados por su equipo del GORE.
El gobernador, imputado por la presunta comisión del delito de fraude al fisco, remarcó a su salida de la Fiscalía que "nuestra voluntad es colaborar con absoluta disposición, tanto con la Contraloría General de la República como con el Ministerio Público, para esclarecer todo lo relativo al informe de la primera".
"Por eso, hoy vine voluntariamente a declarar, y entregué un conjunto de antecedentes que, esperamos, puedan demostrar a la brevedad que siempre hemos actuado correctamente y con apego a derecho", detalló.
No obstante, ha trascendido que al menos la incautación de aparatos desde su domicilio tomó a Orrego por sorpresa, pues no se encontraba en el lugar en ese momento.
"Si bien no sabíamos cuándo se iban a realizar (estas diligencias), en ningún caso fueron producto de una orden judicial: fueron entregas absolutamente voluntarias, como también lo reiteró la Fiscalía (...), ellos saben que había disposición de nuestra parte de entregar voluntariamente nuestros teléfonos celulares y computadores, así que esto de un allanamiento es falso", reiteró la autoridad.
La salida de Mayuri Reyes desde el GORE
Estas diligencias tienen lugar en medio de nuevos cuestionamientos, dada la contratación por trato directo desde el GORE de la empresa Ajem Consultores, que recibió cerca de 110 millones de pesos por apoyar la revisión de proyectos, pues el dueño de la consultora sería socio en otra compañía con la asesora Mayuri Reyes, cercana a Orrego desde el 2005.
En la víspera, se conoció que el gobernador le pidió la renuncia a Reyes, y consultado al respecto, planteó: "El viernes pasado, el consejero (UDI Álvaro) Bellolio hizo una denuncia en relación con un eventual conflicto de interés entre una jefa de división nuestra y una empresa contratada" por el GORE Metropolitano.
"Hechas las averiguaciones, si bien no había una conexión laboral vigente, sí existió en el pasado, y este elemento fue omitido a la autoridad, razón por la cual le pedí la renuncia el domingo", aclaró Orrego.
Volviendo a la causa central, reafirmó que "no se ha destinado nigún peso público al financiamiento de mi campaña, la cual financié con préstamos públicos, que fueron debidamente rendidos ante el Servel", y fustigó "la actitud de aprovechamiento político de los consejeros regionales de José Antonio Kast (Partido Republicano), que insisten en pedir mi destitución cuando hay una investigación en curso, y ninguna acusación en mi contra".
