Justicia y respeto por su duelo exigió este miércoles la familia de Alfredo Rodríguez, el hombre de 62 años que fue asesinado de forma inclemente mientras acompañaba a su hijo a la venta de un PlayStation en la ciudad de Rancagua.
El crimen ocurrió alrededor de las 20:00 horas del martes en una plaza de la Villa Triana, punto de encuentro pactado a través de la plataforma Facebook Marketplace.
El alcalde Raimundo Agliati visitó a los deudos esta jornada y alertó sobre los riesgos de esta clase de transacciones en medio de la actual crisis de seguridad. También comprometió apoyo legal para la persecución de los asesinos.
Don Alfredo "era protector con su familia: estaba siempre pendiente de que todos estuvieran bien, que todos llegaran bien a sus casas... Nos amaba a todos", explicó su nieto Sebastián Pozo en una declaración difundida por el municipio.
"Era bastante querido por sus compañeros de trabajo, también por los vecinos acá en la población. Se llevaba bien con todos. Le gustaba su trabajo", añadió Pozo, y dijo esperar "que se haga justicia: que se encuentre (a los responsables); que no quede como un caso más de desgracia en Rancagua".
"Estamos acá apoyados por el alcalde, entonces tenemos un buen respaldo para poder atrapar a estos tipos y lograr hacer algo", dijo el nieto.
"Era un hombre muy, muy, muy bueno... Necesito que se haga justicia. Necesito que se le haga justicia a mi esposo", clamó la viuda, Teresa Cantillana.
"Pedimos respeto por nuestro dolor"
"Como familia queremos pedir, por favor, respeto por este momento tan doloroso que estamos viviendo", complementó Susan Lobos, hija de la víctima.
"Pedimos respeto por nuestro dolor. Lo que ha golpeado a nuestra familia es una tragedia y queremos vivir nuestro duelo en paz", añadió.
Está previsto que, realizada la autopsia de rigor, el cuerpo de Alfredo Rodríguez sea entregado este jueves a sus familiares para la sepultación.
Mientras tanto, Carabineros sigue adelante con las diligencias para identificar a los autores del robo con homicidio, "un hecho brutal e inaceptable que no solo arrebató la vida de un trabajador rancagüino, sino que también destruyó una familia", dijo la Municipalidad.
"Condenamos con firmeza este acto y reafirmamos que no vamos a normalizar la violencia en nuestros barrios. La seguridad pública requiere una respuesta urgente, un compromiso real y transversal desde todas las instituciones", añadió la alcaldía, que dispuso "apoyo psicológico, social y legal" para los afectados.