Continúa la tensión entre Chile y Argentina por los dichos del ministro de Economía trasandino, Luis Caputo, quien calificó al Presidente Gabriel Boric como "un comunista que los está por hundir (a los chilenos)".
La polémica declaración fue respaldada por el presidente Javier Milei, quien aseguró que su secretario de Estado puso "a zurdos en su lugar".
Debido a esta situación, desde Cancillería presentaron una nota de protesta al Gobierno argentino, rechazando las "inapropiadas e inexactas declaraciones del ministro Caputo". Por su parte, el presidente Boric respondió a los dichos, haciendo un llamado a la humildad a su par trasandino.
El canciller Alberto van Klaveren reconoció que las relaciones con el país vecino no están en su mejor momento. En ese sentido, se estudió la posibilidad de mantener en territorio nacional -como señal de protesta- al embajador de Chile en Argentina, José Antonio Viera Gallo, quien retornó al país debido a sus vacaciones.
Sin embargo, lo anterior fue descartado por el canciller Van Klaveren a modo de bajar la tensión, aunque no descartó una reunión con el Presidente Boric por el tema.
Insulza: "Puede volver a pasar"
El excanciller José Miguel Insulza (PS) presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, valoró las acciones del Gobierno tras las declaraciones y expresó que "desgraciadamente, nuestros vecinos tienen una forma de hablar y de referirse a los temas bastante distintas a la nuestra, a veces eso provoca este tipo de problemas".
"El comentario del Presidente fue absolutamente a otro nivel, fue con altura de miras y a mí, realmente, me hizo sentir muy contento lo que dijo. Está bien para tranquilizar la situación, pero repito, hay que partir de la base que la forma en que tienen de hablar el general de Argentina y el presidente de Argentina en particular, esto puede volver a pasar en cualquier momento", complementó el legislador.
En conversación con Cooperativa, el diputado Andrés Longton (RN) expresó que está en contra del tono utilizado por Caputo. Sin embargo, atribuyó la falta de relaciones con el Gobierno argentino como causa de dicho comentario.
En tanto, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, Vlado Mirosevic (Partido Liberal), manifestó que "no hay que confundir las diferencias ideológicas con la relación entre los estados. Yo creo que se está anteponiendo lo primero, y creo que hay que tener mucha mesura y no seguir escalando este conflicto".
"Me parece que la salida del Presidente es lo que corresponde, sin perjuicio de que él también tiene que hacer una culpa respecto a los hechos pasados que han tenido que ver con estas desavenencias, lo que pasó en el G-20, o cuando vino el presidente de Milei a Chile y no lo recibió", agregó el precandidato presidencial en Cooperativa.
Mirosevic también enfatizó que "no tiene ningún sentido que nosotros caigamos en una provocación, porque probablemente eso es lo que está buscando también el presidente Milei. Yo creo que hay un diseño de provocar, si no, uno no se explica. En Chile cualquier persona, cualquier autoridad habría dicho algo ni siquiera parecido de lo que dijo Caputo".
Estos dichos han captado distintas reacciones en el mundo político. Por ejemplo, desde la bancada de la UDI manifestaron su apoyo al Gobierno del Presidente Boric, calificando las declaraciones como "una ofensa hacia el Estado de Chile".
Por otro lado, desde el Partido Republicano respaldaron lo señalado por las autoridades argentinas. En esa línea, José Antonio Kast indicó que Caputo no dijo ninguna mentira.