alala recibió un disparo en la cabeza por defender la educación de las niñas y ganó un Nobel de la Paz por su labor en ese campo, pero es despreciada por muchos en su país, Pakistán, donde algunos la acusan de ser una espía, de traición por abandonarlo o de simular el ataque que casi la mata. La joven de 20 años ha sido recibida por el Gobierno y las instituciones paquistaníes con honores en su primer regreso a Pakistán desde que le dispararon en 2012.

El religioso castigó al menor, de nueve años, por salir repetidamente de la escuela sin permiso. Los padres de la víctima decidieron perdonarlo y no denunciarlo a la policía.

El atentado fue revindicado por el grupo terrorista talibán TPP.

Los guardacostas paquistaníes destruyeron, este lunes, en la ciudad de Karachi una gran cantidad de licor ilegal y drogas que han sido confiscadas.

Un estudiante murió tras ser apaleado y baleado en la universidad por supuestamente publicar mensajes contra Mahoma en Facebook. Este miércoles comenzará el juicio que, por motivos de seguridad, se celebrará en la prisión de Haripur (oeste).

Al menos 15 personas han muerto en las inundaciones que afectan desde hace dos días la ciudad paquistaní de Karachi, donde las lluvias han provocado el caos y paralizado la actividad industrial y económica.

El ataque con bomba se registró la última noche en un cuartel de la ciudad de Quetta, al suroeste del país. Otras 25 personas resultaron heridas.

Al menos 16 personas han muerto y 60 han resultado heridas como consecuencia de las lluvias torrenciales que azotan a Pakistán.

Abdul Waheed fue atacando a las víctimas de una en una o en pequeños grupos conforme iban llegando a una ceremonia de purificación. Entre los fallecidos se encuentran cinco miembros de una misma familia.

El portavoz Nafees Zakaria señaló que la medida forma parte del sistema de gestión de la frontera. El gobierno afgano no se ha manifestado hasta el momento.

La aeronave de Pakistan International Airlines se desplazaba entre Chitral (norte) y la capital Islamabad.

El accidente ocurrió a primera hora de la mañana en la ciudad de Karachi.

La totalidad de las víctimas pertenecen a la minoría cristiana de la localidad de Jhelum. Estas tragedias se producen con frecuencia en ese país, una república islámica donde sólo se permite consumir alcohol a los no musulmanes.

Tres terroristas entraron en las instalaciones policiales y empezó una batalla contra las fuerzas de seguridad. Los sujetos llevaban chalecos bomba y que dos de ellos activaron los explosivos que portaban.

La adolescente ayudó a otra joven a huir con su novio, quienes lograron escapar de Pakistán. La madre de la víctima apoyó la decisión del consejo del pueblo en el denominado "crimen de honor".

La pastelería colinda con una tienda de pesticidas. Tres personas han sido detenidas por su posible responsabilidad en los hechos.