Sergio Morales, coordinador de Comercio Ilícito y Seguridad de la Cámara Nacional de Comercio, exigió en Cooperativa una investigación exhaustiva de las autoridades para determinar si la inédita proliferación de los malls chinos a lo largo de nuestro país en los últimos años se apega debidamente a la normativa legal.
El abogado explicó que, actualmente, ni siquiera existe un catastro que indique con certeza el número de estos establecimientos, y las estimaciones van desde 200 a más de mil. En las fiscalizaciones que se les realizan, es habitual encontrar "vulneraciones gravísimas": infracciones sanitarias, laborales y tributarias, "pagos en negro" e incluso "posibles casos de trata de personas".
Su modelo de negocio opera con economía de escala, distribuyendo pérdidas, y vendiendo "productos falsificados" o que han ingresado a Chile ilegalmente, sin ninguna certificación, enfatizó.
Ante esta incertidumbre y laxitud de control, "las autoridades deben hacer un levantamiento para determinar si (estos recintos) tiene problemas (puntuales), como todos (los comerciantes), pero son legales", o si su modelo completo es irregular: "No queremos que estén redituando en contra de la ley, tienen que cumplir con las normas que rigen a todos", sentenció Morales.