Un profesor universitario fue absuelto de acusaciones de violencia sexual presentadas por siete alumnas, pese a que un tribunal de Catania (sur de Italia) consideró probado que tocó el pecho a una de ellas, pero "sin ejercer presión".
El hombre, de 68 años y profesor de Medicina de la Universidad de Catania, fue juzgado por los delitos de violencia sexual y acoso verbal por hechos ocurridos entre 2010 y 2014 en el hospital Vittorio Emanuele Ferrarotto.
La Fiscalía ya anunció que presentará un recurso contra la sentencia, dictada por un tribunal compuesto por un hombre y dos mujeres, y que señala que no se hallaron pruebas "más allá de toda duda razonable".
Los jueces reconocieron un "comportamiento depredador y obsesivo hacia las estudiantes", que el profesor escogía "como objeto de sus deseos sexuales", pero consideraron necesario distinguir "caso por caso" si los actos podrían encuadrarse en el delito imputado.
En el caso de la alumna que denunció que el profesor le tocó el seno, los magistrados consideraron parcialmente creíble su versión, pues el acusado "apoyó las palmas sobre el pecho" de la joven, aunque sin ejercer "una presión particular con las manos".
En su criterio, esto impide calificar el hecho como una agresión sexual.
También se descartó una intencionalidad sexual por parte del acusado en otro episodio, ocurrido el día del cumpleaños de otra de las denunciantes, cuando la acosó físicamente.
Según los jueces, solo "quería detenerla para felicitarla", por lo que "parece poco verosímil que, queriendo palpar una zona erógena, el profesor no hiciese ninguna alusión sexual".
La misma joven denunció una segunda agresión en la que el hombre "se le echó encima", pero los jueces tampoco la consideraron verídica, porque "no se entiende qué significa echarse encima, y si esto involucró la esfera sexual de la persona ofendida", y porque "si no hay disenso, no hay violencia".