El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, afirmó este viernes que los palestinos en Gaza "están padeciendo" probablemente "la fase más cruel" del conflicto, en medio de una intensificación de la ofensiva israelí.
"Por casi 80 días, Israel bloqueó la entrada de ayuda internacional vital", afirmó el jefe de Naciones Unidas. "Toda la población de Gaza corre riesgo de hambruna".
Tras el bloqueo total, desde el lunes "la ayuda humanitaria finalmente está llegando poco a poco", pero lo que Israel ha permitido representa "solo una pizca cuando se necesita un diluvio", dijo a la prensa en Nueva York.
"En los últimos días, se autorizó la entrada de casi 400 camiones a Gaza a través del cruce de Kerem Shalom. Pero solo se pudo recoger la carga de 115", señaló António Guterres.
El alto funcionario denunció los "impactantes obstáculos" impuestos por Israel, desde procedimientos complicados hasta "cuotas", pasando por limitaciones a los tipos de mercancías autorizadas.
Unos 160.000 pallets de ayuda, "suficientes para cargar casi 9.000 camiones", esperan entrar en Gaza, insistió.
El Programa Mundial de Alimentos señaló el jueves que estas reservas, ubicadas fuera de Gaza, serían suficientes para alimentar a toda la población durante dos meses.
"Al mismo tiempo, la ofensiva militar israelí se intensifica, con niveles alarmantes de muerte y destrucción", denunció el secretario general de la ONU, enfatizando también que la población no puede acceder al 80% del territorio del enclave.
"El panorama general es que sin un acceso rápido, fiable, seguro y sostenible a la ayuda, más personas morirán, y las consecuencias a largo plazo para toda la población serán profundas", advirtió Guterres, reiterando además su llamamiento a un alto el fuego permanente y a la liberación de los rehenes retenidos por Hamás.