Mario Desbordes comentó la polémica que involucra al ministro de las Culturas, Mauricio Rojas y desestimó que debiera renunciar.
Ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, descartó que el Museo sea un montaje.
El presidente de RN sacó la voz en la polémica por el Museo de la Memoria.
El diputado y presidente de Renovación Nacional, Mario Desbordes, comentó la polémica que involucra al ministro de las Culturas, Mauricio Rojas, quien apuntó hace dos años que el Museo de la Memoria es un "montaje" y que cuenta una "verdad falsa".
En conversación con El Primer Café, el dirigente de Chile Vamos recalcó su "condena absoluta a las violaciones a los derechos humanos" y afirmó que "no hay ningún contexto que justifique ninguna violación a los derechos humanos", aunque insistió en que a su juicio el Museo cuenta con un sesgo.
"No adhiero a lo que planteó el ministro, en ninguna parte he dicho que es un montaje, lo que sí digo es que hay un sesgo y ese sesgo a mí no me gusta y que me gustaría ojalá que nos sentáramos y llegáramos a un consenso respecto de lo que debe tenerse en cuenta", planteó.
Respecto a si Mauricio Rojas debiera dejar su cargo, para Desbordes "fueron dichos en un momento específico, ya dio una explicación" y "en lo personal creo que no debiera renunciar, pero eso lo vamos a ver en el comité político de hoy en La Moneda".
Además, Desbordes, ex carabinero, explicó que el sesgo al que se refiere es que considera que también debiera recordarse a los muertos por la violencia política durante la dictadura.
"Lo que yo planteo es que tratándose de una institución que tiene 11 mil millones de pesos de presupuesto es que se ampliara esto, reconociendo que la violación de los derechos humanos es gravísima y es lo más grave en la escala de reproche jurídico y moral, al otro escalón que está más abajo que son los delitos cometidos por razones ideológicas y políticas de personas inocentes", comentó.
"Estoy hablando de personas inocentes asesinadas en el Metro, en la calle, uniformados o civiles, que creo que fueron víctimas de la locura que se vivió en esos años, donde por un lado hubo violación a los derechos humanos condenable, execrables, injustificables y por otro lado una violencia política que tiene una lógica muy perversa y que provoca que mueran 200 chilenos o más. Esos chilenos, mis amigos, también tienen derecho a memoria", concluyó.
En tanto, el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, rechazó que el Museo de la Memoria pueda ser considerado un montaje, pero evitó referirse a una eventual salida de Rojas.
"Uno no puede calificar una verdad histórica como un montaje, no es un montaje. Si hay alguien que cree que el museo debiera expandir su análisis, su muestra a otros factores es legítimo, pero calificarlo de montaje no es correcto, porque muestra una realidad que todos repudiamos", aseveró.
Respecto a la salida o eventual continuidad de Mauricio Rojas, Monckeberg sostuvo que "él mismo dice que hoy día no piensa aquello, que se equivocó, que tiene otra visión y también creo que eso es legítimo".
En el mundo parlamentario también hay molestia con el ministro de las Culturas. De hecho, senadores de la oposición pidieron a Mauricio Rojas retractarse y que pida disculpas públicas, asegurando que no lo recibirán en la comisión de Educación y Cultura.
"Es un problema que tendrá que definir el Presidente, lo que yo advierto es que aquí él (ministro de las Culturas) va a tener en Cultura un problema permanente que no se zanja con una u otra declaración, porque las convicciones ya las tiene y tiene derecho a tenerlas y a sostenerlas, por lo tanto aquí hay una contradicción enorme entre sus convicciones y en lo que tendría que hacer", dijo el senador Jaime Quintana (PPD).
"Aquí hay una falta de idoneidad para este cargo y esto se va a tornar en un problema para el Gobierno", añadió el senador.
Mientras que los jefes de bancada de diputados de los partidos de Chile Vamos restaron dramatismo a la situación del ministro Rojas.
El jefe de los diputados de Evópoli, Luciano Cruz-Coke, respaldó a Mauricio Rojas y afirmó que tiene derecho a cambiar de opinión.
"Si bien no es una buena declaración y creo que hiere la sensibilidad de algunos, no lo inhabilita para ser ministro de Cultura toda vez que él también ha demostrado un cambio de opinión a este respecto", aseveró.
Por su parte, el UDI Javier Macaya planteó que "la izquierda hoy día se une para tratar de inhabilitar a un ministro de Estado y creo que obviamente el camino que espera Chile es otro".
A su turno, el jefe de bancada de RN, Leopoldo Pérez, manifestó que "yo dejaría que el ministro Rojas desarrollara su labor como ministro y no empecemos con esta guerrilla de empezar a inhabilitar personas previo a que asuman sus cargos".
