La Justicia determinó enviar a prisión preventiva a los abogados Gonzalo Migueles -que también es pareja de la destituida jueza Ángela Vivanco-, Mario Vargas y Eduardo Lagos, como imputados de los delitos de lavado de activos y soborno reiterado en el marco del caso conocido como "muñeca bielorrusa".
El plazo de investigación -período por el que también estarán tras las rejas en el anexo penitenciario Capitán Yáber- fue fijado en 90 días por el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago.
La jueza Michel Ibacache expresó: "El fantasma de la corrupción al interior del Poder Judicial hoy dejó de ser algo etéreo. Era un discurso que se repetía cada vez que se fallaba algún asunto que no era del gusto de la mayoría".
"Hoy, después de escuchar los antecedentes reunidos por el Ministerio Público, ese fantasma con el que durante mucho tiempo hemos convivido se ha hecho realidad al interior del PJ. Se formó una red de corrupción que tiene como integrantes a una juez de la más alta jerarquía y conservadores de bienes raíces, notarios y abogados", fustigó.
"Con los hechos conocidos en la presente formalización, queda arraigado en el ciudadano común que la única forma de obtener un fallo favorable es pagando por dicha resolución. Si este hecho no constituye un peligro para la seguridad de la sociedad, entonces no sé qué otro puede afectar de una manera tan directa a la sociedad en su conjunto", expresó la jueza.
La decisión judicial se da tras ocho jornadas de formalización de los tres acusados, a quienes la Fiscalía les atribuye haber sido intermediarios de la entrega de una coima del consorcio chileno bielorruso Belaz Movitec, a fin de obtener un fallo a su favor en un litigio mantenido con Codelco.
El ente persecutor sostiene que dicha coima es de 15.600 dólares y llegó a las manos de Ángela Vivanco, otrora magistrada de la Corte Suprema que fue destituida de su cargo por sus relaciones con Luis Hermosilla y que presidió el fallo que perjudicó a la cuprífera estatal, en el que, además, votó a favor del consorcio.