Chillaneja de nacimiento, penquista por adopción y viuda de Bruselas. Esposa, mamá de prematuro y profe en la Universidad de Concepción (UdeC). Entró a dicha casa de estudios en 1989 y nunca más la ha abandonado.
Alumna ayudante primero, abogada, colaboradora académica después y actualmente profesora asociada de su Alma Mater, su vocación es enseñar y ayudar en la formación de futuros abogados/as. Busca que aprendan a mirar más allá de las fronteras y que analicen la realidad internacional con ojo crítico. Así, se ha fascinado y comprometido enseñándoles las asignaturas de Derecho Internacional, Relaciones Internacionales e Integración Europea.
Entre 1998-2000 vivió en Louvain-la-Neuve, Bélgica, donde estudió un Diplomado y Master en Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales en la Université Catholique de Louvain (su segunda Alma Mater). Después de una década, regresó a Europa, pero esta vez a Bruselas, donde estudió un Doctorado en Relaciones Internacionales.
Le encanta Europa y los temas relativos a su proceso de integración y sus desafíos políticos. En 2002, junto a colegas de la U. de C., creó el Programa de Estudios Europeos, del cual ha sido su Directora. Su esfuerzo, y el de los alumnos, les permitió ganar un módulo Jean Monnet de la Comisión Europea, del que fue su responsable.
En lo más familiar, la vida también es atravesar fronteras. Le gusta mucho viajar, conocer gente de diversas culturas y ambientes. Todo enriquece. Es mala para cocinar, pero se defiendo como puedo. Tiene mala mano para las plantas y cero habilidades artísticas.
Le gusta leer de todo. Sin embargo, sus preferidas son las novelas de misterio, suspenso y con trasfondo político. Sus gustos van desde Dominique Lapièrre y Larry Collins (le encantó "El Quinto Jinete"), John Le Carré a Roberto Ampuero y las imperdibles historias de Cayetano Brûlé. Sus favoritas son las de Agatha Christie y el insuperable inspector belga Hercule Poirot.
Actualmente, es confesadamente seriéfila. Sus preferidas son las nórdicas (Borgen, extraordinaria como Bron/Broen o Forbrydelsen). También le gustan las británicas y algunas estadounidenses.
Lo más arriesgado de su vida: pasó el 27/F en un onceavo piso en Concepción, por lo que no le cuentan cuentos con los terremotos (es de las pocas cosas que no echó de menos en Bélgica) y el nacimiento de su hijo (que casi no lo cuentan ambos).
Ha vuelto a Chile y ha retomado sus clases en la Universidad, algo que echó de menos profundamente.