Con 80 votos a favor (varios de ellos oficialistas), 39 en contra y 16 abstenciones, la Sala de la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó este miércoles la acusación constitucional que enfrenta el exministro de Energía Diego Pardow (Frente Amplio) a propósito del sobrecobro en las cuentas de la luz.
La Sala discutió el libelo en una sesión especial que se inició a las 10:00 de la mañana, y en la que Pardow fue acompañado por los ministros Álvaro Elizalde (Interior), Macarena Lobos (Segpres), Camila Vallejo (Segegob), Nicolás Grau (Hacienda) y Adriana Delpiano (Defensa).
El exsecretario de Estado decidió no deducir la cuestión previa y salir a refutar directamente el fondo de la acusación constitucional.
Cumplido este paso en el pleno de la Cámara Baja, la acusación constitucional avanzó al Senado, cuyos miembros deberán pronunciarse, como jueces, sobre la eventual responsabilidad política del frenteamplista: la mayor sanción en juego es la inhabilidad por cinco años para ejercer cargos públicos.
Ante la Cámara Alta, el libelo será sostenido por los diputados Jaime Mulet (FRVS), Sergio Bobadilla (UDI) y Carla Morales (RN).
El martes, la comisión revisora del libelo había recomendado a la Sala aprobar el juicio político contra Pardow, que ha defendido su decisión de no actuar ante el error metodológico que causó el cobro extra -desde 2017- en las tarifas eléctricas y por qué no comunicó la similar situación de Transelec, informada hace un año.
El otrora titular de Energía reiteró que ni él ni ningún ministro tienen la facultad de pedir a la Comisión Nacional de Energía (CNE) que haga de nuevo el cálculo de las tarifas y que era mejor hacer una auditoría para investigar el efecto del error; y que, en el caso de Transelec, enfatizó que no dio a conocer la situación mientras no tuviera datos concretos para no generar alarma en la ciudadanía.
Pardow: "Lo que se escucha en la fundamentación de los votos son críticas políticas"
Una vez finalizada la sesión, Pardow fue consultado por el resultado, especialmente por el apoyo de algunos parlamentarios del gobierno a la acusación. El extitular de Energía restó valor a los argumentos esgrimidos en la Cámara, señalando que la decisión se basó en razones políticas y no jurídicas.
"Los diputados tienen una legitimidad democrática que viene de su propia elección. Esto vale tanto para Gobierno como para oposición, pero eso no significa que tengan razón. Lo que se escucha en la fundamentación de los votos son críticas políticas. Yo ya no soy ministro, pero me las tomo con la mayor humildad que me corresponde. No son un fundamento en una infracción constitucional", afirmó.
Pardow, quien estuvo acompañado de los ministros Álvaro Elizalde (Interior) y Macarena Lobos (Segpres), junto a varios parlamentarios oficialistas que lo respaldaron en la Sala, manifestó su optimismo de cara a la etapa en el Senado.
"Yo lo que espero es mostrar que los hechos que se imputan y las supuestas infracciones no son tales", señaló el ex secretario de Estado.
"Es algo doloroso"
El mismo martes, a la salida de la comisión, Pardow fue abordado por la prensa sobre el presunto conflicto de interés que tiene con la empresa eléctrica a través de su pareja, Catalina Iñiguez, que supuestamente es socia del estudio jurídico que representa a la firma.
"Cumplí íntegramente con las reglas de declaración de intereses de patrimonio y, en particular, también quisiera rechazar tajantemente la existencia de un conflicto de interés respecto de mi pareja. Ella nunca ha trabajado con Transelec ni antes que yo fuera ministro ni después", contestó Pardow, cuya defensa, Francisco Cox, impugnó el cuestionamiento porque no forma parte de la AC.
"Esto es un caso entre empresas privadas que no tiene ninguna relación con la sobrevaloración de los activos por parte de Transelec y cuyo inicio y patrocinio es previo a que yo asumiera como ministro de Estado", afirmó.
Por último, reconoció que "le dolerá" perder su puesto de profesor en la Universidad de Chile, en caso de que el libelo sea aprobado en el Senado la próxima semana: "Mi vocación es la de una persona académica. Soy profesor de la Facultad de Derecho de la U. de Chile desde el año 2008".
"Quedar obviamente inhabilitado de aquello es algo doloroso. No tengo ningún problema en admitirlo y, por lo tanto, voy a hacer todo lo posible por tratar de evitarlo", expresó.