Iamim Noraim: un período de reflexión en el calendario judío
Los judíos estamos en el período que denominamos Iamim Noraim (en español "días terribles"). Son 10 días que transcurren entre Rosh Hashaná (Año Nuevo Judío) y Iom Kipur (Día del Perdón).
Dedicamos estos días a la reflexión y el arrepentimiento de los errores cometidos durante el año anterior. Así, iniciamos el siguiente año, enmendando nuestras faltas e intentando ser mejores personas. Pedimos perdón a D's por las faltas cometidas respecto a Él, y también con nuestros semejantes, a quienes debemos acercarnos para corregir lo ocurrido.
Son días difíciles, pero constituyen un verdadero regalo que nos recuerda que somos seres morales, que tenemos un deber con quienes nos rodean y con nuestra comunidad y debemos actuar en consecuencia. Si no lo hacemos, tenemos siempre la posibilidad de rectificar nuestro rumbo y hacer las cosas bien.
Iom Kipur, la culminación de este período, es el día más sagrado del calendario judío, aquel en que buscamos la expiación de los pecados y la reconciliación con D's y el prójimo a través del arrepentimiento, el ayuno y la oración.
Habiéndose iniciado este año judío 5784, me ha conmovido la frase de Yeshayahou Leibowitz: "En vez de ser buenos entre Rosh Hashaná y Iom Kipur, seamos buenos entre Iom Kipur y Rosh Hashaná". Este químico, filósofo y escritor israelí nos insta a invertir el proceso y llevar el espíritu de los Iamim Noraim más allá de sus límites temporales.
Es decir, en lugar de enfocarnos en el arrepentimiento y la espiritualidad solo durante los 10 días de Iamim Noraim, Leibowitz dice que deberíamos esforzarnos por actuar correctamente todo el año, haciendo de esto una constante en nuestras vidas.
Aunque los judíos hemos estado presentes en Chile desde el siglo XVI, cuando llegaron los primeros desde la Península Ibérica escapando de la Inquisición, es probable que muchos no estén familiarizados con lo que es Iamim Noraim. Es por ello que esta columna cobra especial valor, pues nos importa mucho que la comunidad nacional conozca nuestras principales tradiciones.
Aprender sobre otras religiones o culturas, permite apreciar la pluralidad de experiencias y creencias que enriquecen nuestro mundo. Es más: estos 10 días pueden ser una inspiración para todos -independiente de su credo- para reflexionar sobre sus acciones, metas y valores. Puede ser un momento para considerar la importancia del perdón, la reconciliación y el crecimiento personal, enmendando aquello en lo que nos hayamos equivocado. El ser humano tiene esa maravillosa y permanente oportunidad.
En este sentido, sería valioso pensar en nuestras acciones y comportamientos del año pasado y considerar qué áreas deseamos mejorar en el próximo. Algunas preguntas que pueden ayudarnos son: ¿qué has hecho que te enorgullece? ¿Qué te hubiera gustado hacer/no hacer? ¿Cuál fue el aprendizaje más importante del año? ¿Cuál es el principio de tu vida que más has valorado este año? ¿Cuál es tu deseo más importante para el año que comienza? ¿Qué te gustaría aprender este año?
Estas preguntas nos invitan a mirar hacia nuestro interior, a reflexionar y a enriquecer nuestra comprensión de nosotros mismos y de los demás, contribuyendo a una vida más plena y significativa.
Invitamos a todos a honrar las palabras de Yeshayahou Leibowitz, haciendo cambios y adaptaciones para ser mejores personas siempre -y agrego- contribuyendo a la tarea conjunta de hacer un mejor país.
La Comunidad Judía de Chile les desea a todos un año 5784 lleno de paz, amor y bendiciones.
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