La Contraloría General de la República se ha pronunciado para delimitar la aparición de los alcaldes y alcaldesas en los medios de comunicación social, en especial, en los espacios matinales de televisión.
Me parece que en general, los jefes y jefas comunales hemos utilizado la tribuna que nos dan los medios - escritos, televisivos, radiales y online - para poner sobre la mesa los múltiples problemas que afectan a nuestras comunidades y, por qué no decirlo, para generar propuestas.
Si eso es frivolizar la función pública, como califica la Contraloría, no estoy de acuerdo.
Sé que entre mis pares, de distinto signo ideológico, causó profunda molestia una ilustración difundida en las redes sociales de la Contraloría, que muestra a un alcalde cocinando en un matinal y anuncia a una alcaldesa que hablará “del clima”.
Yo no he ido ni pienso ir a cocinar ni a bailar ni a hablar del clima a la televisión, y creo que la inmensa mayoría de mis colegas, tampoco.
Es por eso que encuentro que esa ilustración generaliza y prejuicia. Es un juicio de valor afirmar que frivolizamos la función pública y una vulneración a la libertad editorial de los medios connotar de frívolo a un determinado formato de programa.
Yo he hablado de inequidad territorial, de segregación, del sufrimiento diario de los más humildes para ganarse el pan, de desigualdad en seguridad pública. Y no voy a dejar de hacerlo, en el lugar que sea, porque es el clamor de la mayoría de los vecinos de La Pintana.
Comunicar también es parte del trabajo de un alcalde. ¿Que lo hacemos en horario de trabajo? Bueno, parlamentarios, ministros de Estado, subsecretarios, jefes de servicio, superintendentes, policías, fiscales y jueces también hablan diariamente en televisión, en horario de trabajo.
¿O los alcaldes tendremos que esperar que den las 11 de la noche, que es la hora en que habitualmente terminamos nuestras labores, para poder emitir nuestra opinión, para ejercer nuestro derecho a la libertad de expresión?
El lunes pasado apareció la encuesta Cadem Plaza Pública Nº 322. Y la evaluación de los distintos actores frente a la crisis del coronavirus arrojó los siguientes resultados.
Ministro de Salud, 39% de evaluación positiva.
Presidente de la República, 43%.
Presidenta del Colegio Médico, 66%.
Alcaldes, 70%.
No quiero ser mal pensada, pero todo esto me parece extraño.
Los alcaldes hemos propiciado la descentralización de la administración del Estado. Hoy, en esta crisis, ha quedado de manifiesto que funcionamos centralizadamente, por lo que todo se hace más lento y engorroso.
Necesitamos caminar hacia la descentralización, para hacer más eficaz la función pública.
Necesitamos profundizar la democracia y avanzar hacia los verdaderos gobiernos locales.
No somos autoridades de segunda categoría.
Desde Facebook:
Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado