Actualización del Currículum Nacional

Durante todo el mes de agosto, el Ministerio de Educación se encuentra realizando el Congreso Pedagógico y Curricular que busca conocer, desde la voz de los distintos actores del sistema educativo, qué contenidos deberían integrar el nuevo currículum.

Dentro de los contenidos que se han mencionado, destacan la educación ambiental, que responde a las problemáticas que vivimos en la actualidad a nivel mundial; contenidos de índole tecnológicos como programación y el uso de la inteligencia artificial; y la formación ciudadana, entre otras.

La definición de nuevos contenidos curriculares debe responder al mundo actual que estamos viviendo, con sus demandas y desafíos, y entregar a los niños, niñas y adolescentes de nuestro país las competencias y herramientas necesarias para desenvolverse de manera óptima a lo largo de su vida.

De esta manera, podemos decir que la definición de "qué queremos que aprenda el estudiantado" refiere a su funcionalidad y es sólo la punta del iceberg de un currículum que debe y tiene la oportunidad de repensarse.

En segundo lugar, se debe resguardar su extensión. En la actualidad, el currículum que nos rige se caracteriza por tener un amplio número de contenidos. Esto ha llevado a que el profesorado considere que es inabordable, convirtiéndose en un obstáculo para un aprendizaje de calidad. Más específicamente, el que no se cubra a cabalidad promueve la formación de lagunas de aprendizaje en el estudiantado, las que año tras año se vuelven más extensas y complejas de subsanar. Por otra parte, al intentar abordarlo completamente, muchos contenidos se trabajan de manera superficial, dificultando y poniendo en jaque el aprendizaje profundo de estos.

En tercer lugar, si bien el currículum actual ha promovido la interdisciplina, impulsando que el estudiantado desarrolle aprendizajes más complejos, se debería avanzar un paso más allá, hacia la integración disciplinar, en donde diversas disciplinas tributen a una temática específica. Para esto, el uso de metodologías activas como Aprendizaje Basado en Proyectos o en Problemas (ABP) es fundamental.

Como es posible observar, la elaboración de un nuevo currículum nacional debe considerar ciertas características necesarias para que, a través de su implementación, se promuevan aprendizajes de calidad y respondan a las necesidades de la futura ciudadanía.

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