Instant karma

Alejandro Moreno

Ultimos publicados:

• El día en que nos volvamos a abrazar
• Instant karma
• Turismo, el nuevo liderazgo de Chile en Sudamérica

Si Lennon aún respirara, veo las cuerdas de su guitarra librando una batalla campal en pos de una cura. Lennon no está y su mundo imaginario tampoco. 

Aprendizaje, transformación y fragilidad son los conceptos que se me repiten cómo el común denominador de nuestro minuto en el siglo. Las economías naufragan y veo cifras que no distan de lo cierto, es que el producto interno bruto, no será más que, el triste indicador de la brutalidad de nuestra inercia y el centinela de nuestro ocaso. El mundo vocifera a gritos transformación.

Si en medio de la crisis tus proyectos, e ideas siguen saliendo de paseo sólo en tus sueños, cuando despiertes, probablemente tendremos más hambre que pan.

Si el río revuelto sólo está trayendo desdicha a los pescadores, fue porque los peces aprendieron a devorar anzuelos. Con más de lo mismo se consigue lo mismo. Cambio de paradigmas, de estructuras, de mentalidades deberían ser hoy los platos fuertes del menú.

Cuando la vida nos pone una vez más de rodillas con la espada entre los ojos, no es para que las plegarias lleguen más alto, es para que seamos capaces de redescubrir que la familia es la verdadera fortuna, que los niños son el corazón de la fiesta y que la tercera edad siempre debió ser la primera.  

Si la humanidad no sale de ésta, con más vida que cobardía, con más ganas que lamentos, será porque la humanidad se consolidará como el recurso más escaso. Si la manufactura de abrazos se transforma en el mayor bien de consumo y un nuevo golpe de brisa de mar, en el mayor premio de tu vida, es porque todo tuvo sentido.

Si Lennon estuviera de nuevo agazapado frente a su piano blanco, nos refregaría en la cara que el karma tarda pero llega, que un beso vale más que un millón de likes y que la libertad y no nuestras posesiones, son los contrafuertes de una melodía que jamás debió dejar de sonar.

Imagina si Lennon respirara, si Lennon respirara…