Hace un año nadie pensaba que quien presidiría la Convención Constitucional sería una mujer mapuche. Prevalecía la creencia o supuesto de que los integrantes de las comunidades indígenas no estaban capacitados para los altos cargos públicos. Por lo tanto, hoy la posibilidad de ganar existe. Cualquiera que entre al debate presidencial podría ganar, si logra conectar con las necesidades y aspiraciones de la ciudadanía.
Soy consecuencia de mi biografía. Contemplo la experiencia de Chile desde el punto de vista de un hombre mapuche, con una herencia mixta e intercultural, consciente que generaciones de personas de mi origen fueron subyugadas, estigmatizadas, discriminadas y asesinadas.
Por lo tanto, desde esta experiencia y lugar, es un imperativo ético unir lo que ha sido separado por la fuerza, unir a las dos naciones. Necesitamos una nueva forma de hacer política, que sea capaz de construir sobre lo que nos une históricamente como chilenos.
En este sentido, esta candidatura es mucho más que mi origen humilde. Es la experiencia de la exclusión para la solución de nuestra mega crisis medioambiental, en salud, y la gran ruptura del tejido social que estamos viviendo. Nos molestan las políticas que favorecen sólo a ricos y poderosos, y no llegan al chileno medio ni a los más necesitados.
Me inspira el Kume Mongen Mapuche o Buen Vivir, la cual cree firmemente que el gobierno tiene una responsabilidad y rol fundamental en asegurar que todos tengan igualdad de beneficios y oportunidades, y es eso en lo que creo.
Queremos debatir en igualdad de condiciones con los candidatos de partidos políticos, quienes representan a una élite favorecida con oportunidades. Traté varias veces de trabajar con partidos políticos, como la Democracia Cristiana (DC) y la Izquierda Ciudadana (IC). Por eso tengo muy claro que no importa cuál sea la tienda política, es muy común verlos terminar protegiendo solo los intereses de su grupo y de la élite. Y esa es la razón que soy candidato independiente.
¿Si se pregunta qué sabe este profesor, este mapuche, este asesor en asuntos indígenas sobre economía? Sólo falta reflexionar en serio sobre lo que han hecho los doctores en Economía de Chicago en relación a la distribución de la riqueza y la devastación de la naturaleza en Chile, generando problemas de salud ecosistémicos graves. Aquí necesitamos buenos gabinetes. Necesitamos economistas con una visión más amplia e inteligente, sobre todo con conciencia social y ecológica. La economía debe estar al servicio de la salud y bienestar de la persona, y no al revés, como lo observamos hoy.
Soy mapuche, eso no significa que "yo soy" el representante del pueblo mapuche, porque mi pueblo es tan diverso como lo son los chilenos. Pero sí represento a los que siempre dejan fuera, a los que tienen menos, a los que no tienen contactos para "apitutarse". Creo en el esfuerzo personal, en la meritocracia, en el autoperfeccionamiento para estar auténticamente al servicio de la comunidad y de la Nación.
En Chile no puede haber más abusos, ni atropellos a las personas inocentes. Respeto, integridad, verdad y equidad vamos a buscar en nuestro gobierno. Un gobierno independiente, donde el mandante sea el pueblo, no los poderosos.
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