Las mujeres han estado presentes en las calles, en todos los territorios, al frente de los cacerolazos, en los cabildos auto-convocados, sin embargo seguimos siendo marginadas de la escena política.
¿Por qué los Presidentes de Partido no han integrado en sus idas a La Moneda a mujeres políticas? y no digan que no hay mujeres porque sí las hay.
Somos más del 50% en los padrones de militantes en los Partidos Políticos, y todos los Partidos tienen mujeres dirigentas, ¿qué pasa que no nos incluyen?, ¿por qué les cuesta tanto a los varones compartir el poder?
Las soluciones políticas para salir de la crisis más profunda que enfrenta Chile no pueden ser restringidas o sesgadas sólo a una mirada, la democracia representativa no está completa si no están las mujeres.
Se olvidan que las marchas masivas en Chile retornaron con nosotras. La Alameda se desbordó de mujeres marchando aquel octubre del 2016 adheridas a NI UNA MENOS!, y luego visibilizando nuestro derecho a incidir en las decisiones que nos afectan como fueron las manifestaciones sobre el proyecto por la despenalización del aborto en 3 causales, y cada 8 de marzo.
Esas movilizaciones gigantes fueron en todo el país y nuestra voz, muchas veces silenciada, se comenzó a levantar por sobre los abusos.
Las mujeres salimos a las calles para dejar en evidencia a los poderes que pretendían oprimir nuestras decisiones e instalamos en la agenda pública la discusión sobre la aberrante desigualdad que sufrimos en Chile, una desigualdad que interpelaba a un nuevo diálogo y pacto social, esa desigualdad que permitió la injusticia social sistemática desde una base multidimensional y que finalmente reventó en un desahogo colectivo, explosivo, violento y al mismo tiempo esperanzador.
Resurgió la esperanza de vivir en un país mejor, en un país más justo y la oportunidad de las transformaciones más profundas es hoy.
La desigualdad más aguda es la que enfrentan las mujeres todos los días y en todos los ámbitos de la vida, las desigualdades económicas, sociales y políticas en Chile han calado profundo en nuestras familias, en nuestros salarios, en nuestra seguridad, en nuestras jubilaciones, por mencionar sólo algunas dimensiones de alto impacto, directo y fuerte.
¿Les parece justo entonces que no vean nuestras caras en medio del diálogo o en la construcción de las ideas y las soluciones?
Las mujeres no queremos ser sólo las "colaboradoras", no merecemos sólo ese rol subvalorado, las mujeres queremos y debemos estar al frente, en el diálogo y en las decisiones, porque la democracia se construye con todos y todas, hay suficientes mujeres en política que participan activamente, mujeres con opinión y con alta capacidad para la toma de decisiones, no nos excluyan de la mesa del poder en los momentos históricos de Chile porque esta vez es la ciudadanía completa la que dice YA NO MÁS, y somos las mujeres que hoy decimos nuevamente y con fuerza, Sin nosotras ¡Nunca más!
#MasMujeresEnPolítica #JuntasSomosMas #NuevaConstitucion @MujeresChileHoy
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