La medalla más importante

Ana María Bravo Castro

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Sin duda que los juegos Panamericanos 2023 nos han dejado claro el alto nivel de deportistas nacionales que se han alzado en estas competiciones con una excelente participación a nivel continental. El Team Chile ganó 79 medallas, destacando una gran participación de las mujeres y representantes del territorio que represento, la Región de Los Ríos.

Nombres como Martina Weil, Santiago Ford, Magdalena Nanig, Antonia Liewald, Isidora Soto, Adoni Habash u Oscar Vásquez se han hecho cada vez más populares, siendo ejemplos deportivos para niñas, niños y adolescentes de todo el país. También recibimos desde Turquía, el triunfo de la boxeadora valdiviana Daniela "Leona" Asenjo, quien se viste nuevamente como campeona mundial de este deporte.

Como ven, en cuanto a logros tenemos argumentos de sobra para comprometernos con las y los deportistas, además del valor social que tiene la práctica de estas disciplinas, considerando que son medios apropiados para conseguir desarrollo personal y social; afán de superación, integración, respeto a la persona, tolerancia, perseverancia, trabajo en equipo, autodisciplina, responsabilidad, cooperación, entre otros beneficios que la práctica deportiva trae a la salud de las personas.

A pesar de lo positivo, tenemos una antigua deuda de infraestructura deportiva en Los Ríos y en todo el país. Grandes proyectos que se han quedado en espera como la famosa Pista de Aguas Quietas, Patinódromo, nuevas multicanchas, remodelación de gimnasios y espacios que acogen a deportes que no gozan de tanta popularidad, pero cada vez son más personas quienes los practican.

Si invertimos en infraestructura deportiva estamos invirtiendo en salud y desarrollo social, sembrando más oportunidades, esparcimiento y recreación, que repercutirá de forma positiva en la sociedad, alejando los males y vicios que tanto daño causan nos causan día a día.

Porque niñas, niños y adolescentes de Chile merecen soñar en grande y nuestra tarea es que el deporte pueda llegar a todas y todos, sin importar género, origen y realidad socioeconómica. Esa es la medalla de oro, más importante que debemos ganar como país.