El mar y la proyección de Chile

Karen Manzano Iturra

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Cuando se habla del Mes del Mar, automáticamente lo asociamos a la gesta de Prat y sus marinos en el Combate Naval de Iquique, sin embargo, olvidamos los alcances que posee el mar para la vida nacional a lo largo de su historia. Chile fue descubierto por mar, cuando en 1520 Hernando de Magallanes cruzó el estrecho que bautizó de "Todos los Santos" y que se haría conocido con su apellido, un lugar inhóspito y alejado que estuvo unido desde el inicio al destino de la Capitanía General de Chile, a sus límites y autoridades, por ello los intentos de llegar a sus aguas desde nuestras costas mandatados por los gobernadores de la época.

Durante la Colonia y la Independencia, el mar unía la zona central con Valdivia y Chiloé, debido a la falta de conexión terrestre del territorio, algo que se mantuvo para Aysén y Magallanes, cuyas primeras ciudades necesitaban el transporte marítimo para acercarse a ellas, debido a que los caminos no se unían con las rutas que llevaban al norte y era la fórmula para llegar a esa zona. Inclusive, el primer viaje presidencial a la Antártica en el mundo se hizo por la única posibilidad existente, el mar, cuando Gabriel González Videla y su comitiva llegaron en 1948.

Por ello, no podemos olvidar la relevancia del mar. Desde la antigua talasocracia ateniense cuyo poder descansaba en su flota hasta el Imperio Británico y sus posesiones en el mundo, muchas potencias afianzaron su presencia desde el siglo XV en base del poder marítimo para conectar las metrópolis y sus colonias, pero también las industrias y las materias primas. Cabe señalar que Chile en el siglo XIX, siendo un país que recién había conseguido su independencia en 1810, comprendía perfectamente esta misión, tanto en el pensamiento de O'Higgins (para dominar Magallanes) o de Portales (para asegurar la importancia de Valparaíso como puerto del Pacífico Sur) que llevó a la incorporación estratégica de Isla de Pascua en 1888 y el desarrollo de una importante flota tras la Guerra del Pacífico.

Todos estos hechos nos confirman que en ese periodo se comprendía perfectamente la importancia de lograr los medios navales para el desarrollo de la República.

En la actualidad, el poder del mundo se ha trasladado a la cuenca del Pacífico, como lo señaló en su momento el general Ramón Cañas Montalva, debido a que se encuentran en sus costas las potencias de la actualidad, como Estados Unidos y China, a los que debemos añadir Japón, India, Australia, Indonesia, enormes economías que mueven el escenario internacional y donde Chile participa a través de foros como la APEC y del intercambio de bienes y servicios.

Sin duda, el mar es parte integrante y fundamental de nuestro país, pues no solo tenemos puertos que miran al Pacífico, sino que tenemos los tres pasos interoceánicos naturales existentes entre el Atlántico y el Pacífico: Estrecho de Magallanes, Canal Beagle y Paso Drake.