La Estrategia Nacional de Integridad Pública (ENIP), lanzada en diciembre del año pasado por el Presidente Gabriel Boric, ya se encuentra en etapa de implementación. Adoptar un enfoque estratégico y sostenible en el combate contra la corrupción es clave y es justamente eso lo que este Gobierno está haciendo, con la colaboración de los distintos poderes del Estado.
A siete meses de su presentación, la estrategia ya cuenta con un sistema de monitoreo de su plan de acción, el cual está disponible en el sitio web de la Comisión Asesora Presidencial para la Integridad Pública y Transparencia, y que permite conocer el detalle de las acciones ejecutadas, obtener visualizaciones por cada eje temático, según tipo de medida y reportes con tasas de cumplimiento.
En términos generales, destaca que 29 medidas -15% del total- se encuentran cumplidas. Entre ellas, está la capacitación en ética realizada a miles de funcionarios de la administración del Estado; la creación de mayores estándares de transparencia en gastos electorales; la regulación de las transferencias en la Ley de Presupuestos vigente, y la creación de una web de empresas estatales. Asimismo, resulta positivo observar que 44% de las iniciativas ya cuenta con más de la mitad de avance, lo que refleja los esfuerzos desplegados para concretar los objetivos. La implementación está en firme marcha.
Hacerse cargo de la implementación de políticas públicas es fundamental, y por eso este Gobierno adoptó medidas concretas en esa dirección. De acuerdo con el reciente reporte global de la OCDE "Perspectivas de Integridad", existe una brecha significativa en todos los países miembros entre lo que establece su institucionalidad y su aplicación, sin embargo, los avances en el plan de acción y poder contar con un sistema de monitoreo transparente y objetivo son muestra del compromiso con la sostenibilidad de esta política pública.
Gracias a su enfoque comprensivo, su diseño y proceso de creación, nuestra ENIP ha sido valorada por la OCDE como una de las mejores, al cumplir con 87% de sus indicadores. En esta etapa de implementación, podremos continuar demostrando el liderazgo de nuestro país en el combate contra la corrupción y su compromiso con la generación de más confianza.
La Alianza Anticorrupción UNCAC Chile, integrada por entidades de diversos órganos del Estado, sector privado, sociedad civil y academia, también jugará un rol en el monitoreo e incluso en la implementación de algunas medidas, lo que otorga mayores garantías para la sostenibilidad de esta Estrategia Nacional de Integridad.
"Que no se quede en un cajón" o "que no sea solo cortar cintas" son frases que se repiten cuando hablamos de implementación de políticas públicas o de propuestas para prevenir la corrupción. Con esta herramienta, las chilenas y chilenos podrán revisar las medidas en materia de integridad y monitorear sus avances, materializando de esa forma un necesario control ciudadano y la apertura en favor de la rendición de cuentas. Avanzamos.
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